Un lustro llevábamos -desde aquel Desolation Rose de 2013- sin novedad en estudio por parte de The Flower Kings. Que no de su alma mater, Roine Stolt, ubicuo e hiperactivo como pocos. De hecho en los últimos tiempos no ha parado, si es que alguna vez lo ha hecho.

Los barceloneses, que ya nos encandilaron con su notable largo de debut Swingin’ and Twistin’ (2016) y que dieron el golpe en la mesa definitivo con el EP Don’t Stop the Rock’n’roll (2018), contraatacan con once humeantes y adictivos temas con Fats Domino y Little Richard bajo las alas.

El grupo folk británico liderado por las hermanas Becky y Rachel Unthank, se han convertido en los últimos quince años en uno de los tesoros musicales mejor guardados de aquellos parajes.

A un año, menos un día, del lanzamiento de Digital Garbage, Mudhoney lanzan los ‘’descartes’’ de aquel en forma de mini-álbum, para el que además han repescado perlas preciosas largamente fuera del alcance.

Tras el intervalo rocanrolero que supuso su activa colaboración y apoyo al primer elepé de José Antonio García, vuelve a refulgir a pleno esplendor el poderío pop de las composiciones de Nico Hernández y compañía.

Formados a partir del núcleo que mantiene vivo a Espasmódicos–TdeK en este siglo XXI (Magüu batería, Esteban y JSiemens guitarras) y los refuerzos de Héctor (Lukas) como bajista y Monje (Larsen, Sagrada Familia) a la voz, Madpunk se proponen como súper grupo revelación.

Emocionar estando solo delante del micrófono con tu guitarra y tu voz no es algo fácil. Pero ahí está este tipo, al que Chris Stapleton definió como “un moderno Townes Van Zandt” tirando de honestidad para marcarse diecinueve temas en ese formato, entre los que incluye cuatro canciones inéditas.

El nombre de Neil Bob Herd no se hará extraño para los habituales de los sonidos de raíces. Él compartí junto a Sid Griffin el liderazgo de The Coal Porters, banda que apostaba por un sonido bluegrass de influencia punk. El grupo parece haberse desmembrado definitivamente, y Neil ha aprovechado a situación para, campaña de crowdfunding mediante, lanzar su primer[Leer más…]

Tindersticks. La sola mención de su nombre evoca un recuerdo, un sonido, crea un ambiente. Pocas bandas hay en el mundo como la de Stuart A. Staples que, instaladas en un segundo o tercer plano de popularidad, siendo generosos, provoquen esas reacciones. Como la de Scott Walker, la de Richard Hawley o la de Leonard Cohen, por poner unos cuantos[Leer más…]

Pequeñas notitas simpáticas con aspecto oriental dan la bienvenida a la nueva ida de olla magistral del siempre acertado Javier Díez-Ena, quizás uno de los pocos creadores de nuestro país que sigue confiando en que no todo está inventado y aún queda espacio para la originalidad; una hipótesis que, de hecho, refuta en cada uno de sus chiflados experimentos sonoros.