Imagen

Infinity Pool – Brandon Cronenberg (Neon)

Mientras papá Cronenberg despacha uno de sus mayores bodrios, la regulera Crímenes del futuro, el hijo, Brandon, entrega un film distópico, visualmente atractivo, lleno de violencia extrema y ese sentido de la ciencia ficción decadente, tan propio de la familia.

Con dos reclamos de primerísima en el reparto como son Alexander Skarsgård y Mia Goth, la acción discurre en un resort de algún país en el que locales son una cosa y los turistas, otra, ya saben. Y es precisamente al desdibujar esos límites territoriales y legales cuando estalla una historia rocambolesca, terrorífica y llena de giros inesperados que conecta, a su manera, Eyes Wide Shut con Aniquilación.

Un libre ejercicio cinematográfico que a más de uno le resultará indigesto, pero que ofrece interesantes lecturas, que invitan a la reflexión. A modo de crítica social, de posible deriva tecnológica y/o reflexión, así como perversión sobre lo moralmente correcto y las consecuencias que jugar con ello pueda ocasionar. Una distopía donde la agresividad y la belleza se dan de la mano, en un filme que abusa del estupor y la hipérbole, pero que también ofrece momentos visualmente sublimes.

Daniel González

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Contacto: jorge@ruta66.es
Suscripciones: suscripciones@ruta66.es
Consulta el apartado tienda