En sus 30 años de carrera, Los Planetas han demostrado de todas las maneras posibles que están aquí para hacer lo que quieran y como quieran. Desde grabar a la desesperada un disco en Nueva York que cambiaría la historia del pop en castellano (y reinterpretarlo 20 años más tarde con una orquesta), hasta reivindicar las formas musicales y el imaginario flamenco para llevarlo al gran público, pasando por derribar la importancia
de la voz en el pop o prescindir de Sony tras un contrato de 12 años para publicar en su propio sello, El Ejército Rojo.
Las Canciones del Agua (El Ejército Rojo, 2022) comienza con el corazón del disco, ese que aparece en la portada como un nido de vida. ‘El Manantial’ abre este décimo disco de los granadinos desafiando todas las normas del mainstream: un tema de 12 minutos de duración que pone música a un poema de Federico García Lorca, en el que los versos del poeta se ven mecidos únicamente por un piano que parece levantar polvo con cada golpe de tecla y una guitarra laxa y elástica, esa que crea las atmósferas de Los Planetas. Esa que eleva e hipnotiza, haciendo que casi un tercio de la duracióndel disco pase rápida como el agua que protagoniza estos versos de 1919.
Los Planetas honran a dos artistas granadinos más en este álbum. ‘Se quierevenir’ es un tema del trapero Khaled que toma el relevo de ‘Islamabad’, la versión deYung Beef que incluyeron en el anterior Zona Temporalmente Autónoma (El Ejército Rojo, 2017), mientras que ‘La Morralla’ fue un tema compuesto por Carlos Cano en 1977. Junto con ‘Alegrías de Graná’, un tema de flamenco popular que lanzaron como
último adelanto, se cierra el primer bloque de este largo.
Estos 4 cortes reafirman a Los Planetas que conquistan al oyente trenzando las raíces y el folklore de Granada con guitarras ruidosas y riffs enérgicos; poco tiene que ver con lo que sigue.
Comienza ahora la pentalogía pospandémica de Los Planetas. Es inherente al serhumano buscar representación personal en el arte. Durante el confinamiento todas lascanciones parecían hablar de ello aunque hubieran sido compuestas años atrás, y el arte se nutre de los cambios políticos, históricos y sociales que se experimentan encomunidad. Sin embargo, en el caso de estos cinco temas de los granadinos, la pandemia aún está demasiado presente como para buscar en la música un relato tan detallado de
estos dos tumultuosos años que más bien parece un noticiario. Inspirados por las violentas revueltas ciudadanas del movimiento Black Lives Matter, los bulos negacionistas que proliferan en las redes sociales y las conspiranoias que inundan los chats familiares, temas como ‘El Apocalipsis Zombie’ o ‘El Negacionista’ no te arropanante la vorágine, sino que la pose desapegada y satírica de Jota tiene el mismo efecto
que una riña parental.
La naturalidad con la que daban vida a ese poema inaugural de Lorca abandona a Los Planetas rápidamente, retratándose como una banda que lucha innecesariamente por estar al día y captar la atención de los oyentes a base de golpes de actualidad. Las noticias y las polémicas pasarán con el tiempo y dejarán de ser relevantes, mientras que Los Planetas, los que defienden su esencia, se mantendrán siempre en el cancionero de
este país.
Texto: Lola López