Nada bueno hacía presagiar el anuncio de otro volumen dedicado al cancionero ajeno. Pero, vueltas que da la vida, este Origins es mucho más dinámico que su hermano mayor, quizás porque las versiones están elegidas con un poco más de tacto y no hay tanto de lo obvio.
Ace brilla especialmente con su instrumento en «Politician» (Cream) y «Never In My Life» (Mountain); actualiza «Lola» (Kinks) con cariño; monta un tandem de ensueño con Robin Zander para engrandecer el «30 Days in the hole» de Humble Pie; descubre a Paul Revere & The Raiders para toda una generación con la grabación de «Kicks»; y ojo, le da una vuelta de tuerca a Space «Ace» Truckin de Purple, con esa especie de jam galáctica que se monta con Rob Sabino. Da gusto ver a Ace disfrutando como un niño. Y si Ace se siente feliz es capaz de sacar cosas muy buenas de sí mismo. Por esa regla, su próximo álbum de material propio debería ser también infinitamente mejor que el poco inspirado Spaceman. Crucemos los dedos.
Texto: Sergio Martos