Vuelven los MFC Chicken con su quinto disco. Son catorce ‘’nuggets’’ frescos de su ya clásico rock’n’roll fiestero, al más puro estilo del garage-boogie de los sesenta.
Ya nos hemos acostumbrado a sus ritmos de jive y swing, pero, en su nuevo trabajo producido por Mike Mariconda, han vuelto a sus inicios. La producción es más cruda que en sus últimos álbumes y es un cambio que les acerca a sus héroes The Fabulous Wailers y The Sonics, el sonido que mejor representa sus actuaciones en directo. La voz barítona de Spencer Evoy, y sus toques de saxofón, siguen siendo las protagonistas, pero, más que antes, las guitarras rugen sus ritmos, licks y punteos e inyectan a las canciones con más energía todavía. Las letras continúan como antes, con el típico tema tratado por el rock ‘n’ roll a través de las décadas; la búsqueda del amor, y los encontronazos con el desamor. Pero, esta vez, también añaden una autocrítica sarcástica, como en el single «Fuck You Me» y, por supuesto, siguen utilizando la referencia a su propio nombre para dar sus toques de humor en canciones como «KFC» y «Free Range». Otra vez, los hermanos pollo han sacado un disco en el que, desde el principio, no puedes evitar bailar y sonreír.
Texto: Nathan Whittle