Segundo avance del próximo nuevo trabajo del músico barcelonés, habitual en nuestras páginas, «Diamond Fanged Black Feline pt.1» es otra vuelta de tuerca a sus influencias y obsesiones, un tema que le muestra madurando a pasos agigantados. Nada menos que siete minutos de pura magia instrumental basada en unos atmosféricos teclados que remiten directamente al kraut y, más concretamente, a la Escuela de Berlín con Tangerine Dream al frente. Una subyugante banda sonora in crescendo, con unas guitarras -en su segunda mitad- a las que cualquier fan de Gilmour dará el visto bueno. Un nuevo acierto, en definitiva, que queda como inmejorable pronóstico a la espera de ese nuevo EP en ciernes.
Eloy Pérez