Una vez más El Hombre Music lo ha vuelto a hacer, ha traído a Albacete algo que la gente, por desgracia, no se esperaba, y vaya cosa la de esta vez. Si metes en una batidora los ritmos funk electrizantes de aquellos primero Red Hot, riffs eléctricos a la par que electrizantes a lo Hendrix y una voz que cualquier cantante que se precie querría tener.
Y si, he dicho cualquiera, hasta el mas pintado, lo bates bien y se lo das a un par de músicos resabiados tales como Gabri Casanova y Kike Parra, con callos de girar, tocar, interpretar y rockear en todos los rincones mas inhóspitos del país y fuera de el para que lo interpreten en ese formato del que el matón de barrio Jack White se cree creador con sus ya fallecidos White Stripes y por lo que llegó a propinar un guantazo al bueno de Patrick Carney (The Black Keys) en un bar, sosteniendo que le habían copiado y machacado el formato.
Perdón, que me voy por las ramas, que sí, los Kamikazes con casco son un dúo que inspira a ese formato, pero mas originales todavía, pues son un dúo de rock con riffs guitarreros y bajos contundentes sin guitarra ni bajo escenario, solo los cacharros con teclas de Gabri acompañados de unos frenéticos ritmos de batería de la mano de Kike, potentes y desquiciados a la par que claros y exactos en su ejecución, capaces de desatar en tu interior un montón de recuerdos de la música de antaño sin dejar de lado la la modernización del blues, el funk y el rock.
Y eso es lo que han ofrecido en la Sala Sideral de Albacete, un show en el que han presentado prácticamente la totalidad de los temas que forman su primer y homónimo LP, intercalando versiones de gente como Little Richard, Al Green o los ya citados White Stripes. Un show vibrante cargado de buena música, saber hacer en las tablas, humor y mucho buen rollo entre artistas y público, buen rollo que siguieron alimentando cuando, inmediatamente después del último acorde y su merecida ovación, se fueron directos a la entrada del local, donde tenían las cajas con su merchandising y se pusieron a atender las demandas del público, vendiendo discos y camisetas, firmando los mismos y haciéndose fotos con el maravillado público, entre los que un servidor se incluye.
Texto y Fotos: Tordo Pinchadiscos