The Rock & Roll Society, rock sin aditivos ni colorantes

Tras una vida dedicada profesionalmente a la música, Benja Estácio, ha abierto las puertas a su corazón rockero. El reencuentro con un viejo amigo supuso el detonante para el nacimiento de The Rock & Roll Society. Una banda de laboratorio, como ellos mismos se definen, que aprovecha al máximo las ventajas que la actual tecnología pone a su alcance para trabajar, crear sus canciones y ponerlas al alcance de sus seguidores.

La sensación que desprenden sus respuestas es que se lo están pasando muy bien, que están haciendo algo en lo que creen, y en lo que vuelcan toda su experiencia como intérpretes y compositores, además de todo el bagaje emocional de la música que los ha acompañado durante toda su vida. Y a tenor de lo escuchado, no hay nada más que darle la razón, una vez más, a uno de los más sabios de este negocio, el finado Lemmy Kilmister, que nos dejó esta frase para la posteridad: “Si piensas que eres demasiado viejo para el rock ‘n’ roll, es que lo eres”. Y de eso, nada.

Benja atendió nuestro cuestionario y nos explicó ampliamente de que va todo este asunto de la Rock & Roll Society. Y tiene mucho que contar.

Bueno, me he quedado alucinado al ver tu currículo, Benja. Músico, montador musical, compositor de géneros diversos, escritor con dos libros publicados e incluso mánager de artistas. Has estado en muchos de los lados de este negocio… Es impresionante….

También fui DJ en un disco-bar de moda en Llavaneras hace muuuuuuuuuuuchos años y he hecho mis pinitos en la TV y de narrador en vídeos de relajación. Es divertido, me entretiene. Mi mujer me dice que la gente se va a pensar que no tengo vida privada! (risas).

Veo que asimismo tienes un proyecto, La Estación del Mar, con la friolera de veintitrés discos editados. Se trata de música electrónica y ambient por lo poco que he podido escuchar….

Bueno, empezó un poco porque a mí me gusta tocar todos los palos, ¿sabes? Y por aquellos años (2006, 2007) estaba bastante de moda Café del Mar. Un amigo con el que habíamos compuesto ya unas cuantas canciones me dijo que conocía un tipo en Jerez que editaba canciones de Chill-out, así que… dicho y hecho! Compusimos un par y ahí quedó la primera toma de contacto. Siete u ocho años más tarde, contacté con Leo (el editor de Jerez) y desde entonces hasta el año pasado… ¡23 discos! Pero el estilo fue cambiando mucho: Se me acababan las ideas y de empezar con el chill flamenquito, a terminar con un poco de ambient y electrónica, pasando por étnica, house y de relajación. Ha sido una etapa entretenida pero cuando estaba acabando el último ya tenía claro que ahí terminaba mi faceta chill.

Bien, llegamos al presente. Hasta el momento, prácticamente todos tus trabajos no tienen mucho que ver con el rock. Pero dices que The Rock & Roll Society es tu proyecto más anhelado…. Explícame un poco eso… ¿Es realmente el rock & roll lo que más te apasiona?

Cuando uno lleva 40 años dándole a la música profesionalmente y un poco como mercenario, se acaba convirtiendo en un trabajo puro y duro. Un negocio. Lamentablemente, se va perdiendo poco a poco ese punto romántico y artístico para terminar siendo algo repetitivo y hasta bastante mecánico. No siempre, evidentemente, y claro que me lo he pasado bien y he disfrutado en algunos momentos (no pocos) pero pasa a ser tu trabajo y no tu hobbie. Un trabajo es tu sustento, un hobbie es tu pasatiempo. Ahora, cerca de los sesenta, vuelvo a tener la música como hobbie y es The Rock & Roll Society quien me lo está dando, aunque debo reconocer que tantos años dedicado profesionalmente, te deja el poso del saber hacer y cómo hacerlo y por supuesto, saber lo que quieres hacer y como dirigir “la empresa” y a veces las cosas no van como tú quieres. Por cierto… una empresa no lucrativa, eh! (Risas).

Ya hemos hablado de ti, preséntame a tus acompañantes, que me dices de Fer Lederer (guitarra), Chris Galen (voz), Tony Abad (bajo) y Esteban Rotunno (batería)…

Fer es un tipo multinacional con todas las letras: criado en Barcelona pero nacionalizado canadiense y con una mezcla maño-lusa muy curiosa y pese a todo, lleva media vida viviendo en Madrid. Nos conocemos desde preadolescentes. Junto con otro compañero de colegio, montamos nuestra primera banda de heavy. Podríamos decir que si yo soy el director o el presidente de The RRS, él es el secretario personal! (Risas). Fer es un tipo muy sabio y zen, lo que hace que nuestra unión sea ciertamente complementaria. Yo soy el genio loco y él es el equilibrio.

A Chris y a Esteban los conozco gracias a internet y mi afán de explorar. Chris tiene una granja en Colorado (Fort Collins) con sus caballos, vacas y demás fauna autóctona pero profesionalmente es profesor de voz y guitarra. Esteban es un músico de estudio profesional 100% Tiene un grupo de versiones en su ciudad (Lomas de Zamora, Buenos Aires) y ha hecho unas cuantas giras con Toquinho y María Creuza y Tony es otro “repescado” de la etapa escolar pero de antes de Fer. A Tony lo conocí en primero de EGB y le perdí la pista en Tercero. Millones de años después, nos encontramos en Facebook y aquí andamos. Tony quizás es el más polifuncional a nivel musical: Toca en cuatro bandas y regenta un bar en Albacete. Sinceramente, para mi entender, es un quinteto muy bien compensado.

De todas formas, parece una formación muy abierta, aparece alguna que otra colaboración en los temas que habéis editado hasta ahora…. ¿Esa es la filosofía? Dejar puertas abiertas a que otros músicos puedan aportar su granito de arena…

De hecho, nos llamamos así para ser evidentes: La Sociedad del Rock & Roll. Pues sí, exactamente eso: Sociedad y R ’n’ R.  Una sociedad donde cabe un joven arreglista de cuerda de Calcuta o un coro góspel de Nigeria.

¿Sabes lo acojonante que es eso? Algo impensable hace pocos años, ahora es un hecho y verlo reflejado en tus canciones, es un puntazo! Todo aquello que imaginé el siglo pasado, ahora es posible y voy a realizarlo con los RRS.

Sois una banda virtual, incluso afirmáis que habéis nacido en un laboratorio. ¿Esa era la idea desde un principio o bien ha sido forzado por las circunstancias?

No, no, la idea primera era hacer un “Juan Palomo rockero” pero con la colaboración nostálgica (volver al pasado) de Fer para las guitarras solistas y tener un cantante diferente para cada nuevo tema. De hecho, el primer tema, «Little Self-made Warrior», está ejecutado íntegramente por mí menos las guitarras solistas y la voz, que es de un cantante de Leicester. Los dos temas siguientes, el cantante fue un dublinés también actor, hasta que al final, la cosa ha ido mutando y nos hemos consolidado como formación en modo quinteto. Eso sí, siempre con colaboraciones. Y ¿por qué incluir a Tony y a Esteban? me preguntarás… pues porque como soy un maldito perfeccionista, preferí tener un bajista de verdad (y amigo desde niños) y un batería porque… ¡Qué sería el Rock sin ellos! Pero eso sí: Laboratorio 100%, ¡pero sin aditivos ni colorantes!

Es obvio que los avances tecnológicos facilitan mucho las cosas, pero… ¿Qué inconvenientes y que ventajas veis en funcionar así?

Bueno, el único inconveniente que le veo es que no podemos tener una foto de familia! (risas) y luego, que no es lo mismo hablar con alguien de Albacete por WhatsApp que escribirte en inglés sin poder hablar. Los audios son muy importantes por el tema de matizar, entonar… la expresión es básica. Podríamos también hablar del tema horarios: en Buenos aíres son seis horas menos y en Fort Collins, ocho. A veces, vamos un poco a destiempo pero vaya… lo tenemos superado. Lo positivo: No hay que cargar con instrumentos, alquilar un local y dejar de ver un partido de fútbol interesante para ir a ensayar o a un bolo. Lo único requerido es aprenderte una canción, grabarla y mandarla por WeTransfer trimestralmente.

¿Cómo trabajáis la composición? ¿Hay algún compositor principal o bien escribís de manera conjunta?

En principio, uno de los motivos por los que creé esta “sociedad” fue para dar rienda suelta a mi composición en modo rockero, de ahí que en general, la composición y los textos, sean míos pero siempre hay alguna aportación de Fer por algún arreglo de guitarra o alguna intro, y entonces compartimos autoría pero no a partes iguales, eh!  (risas).

En realidad, tiene bastante más “gracia” el cómo se desarrolla el tema hasta ver la luz que el cómo se crea o compone. La composición parte siempre de alguna idea musical o de letra que me sale en el momento menos apropiado (risas). Lo grabo y me lo mando a un grupo de WhatsApp donde estoy yo solo y cuando llego al estudio, lo descargo y lo guardo en una carpeta y ahí queda. El tiempo me dirá si valió la pena esa idea o acaba quedando en el limbo.

La grabación empieza cuando necesito abrir el multipistas para guardar la idea porque lleva días taladrándome el cerebro. A partir de ahí, comienzo con los arreglos, voy grabando los instrumentos yo mismo y con los días, acaba convirtiéndose en maqueta. Cuando considero que la maqueta tiene lo necesario, la comparto con los músicos y les doy las directrices ya que, a menudo, yo no soy capaz de interpretar lo que busco en la pista en cuestión ya que los instrumentistas de verdad son ellos. Yo fui aprendiz de todo y maestro de nada. Poco a poco, los músicos van grabando y mandándome por WeTransfer sus pistas y cuando todo está en su sitio, hago una premezcla y junto a las pistas, se lo mando a Maurizio Tonelli, el ingeniero de sonido afincado en Barcelona con más experiencia que he conocido jamás y además, amigo. Él hace una mezcla previa en su estudio (Aurha Studios) y cuando casi está acabado el proyecto, le hago una visita y cerramos la mezcla. Masterizamos siempre en Abbey Road y de ahí, a la discográfica.

Mientras el proceso se ha ido desarrollando, yo he ido creando la portada y teniendo más ideas para más canciones.

Habláis de rock clásico. Un servido percibe mucho hard rock y algo de AOR. Claro que eso es un abanico muy amplio… (Risas) En «We Are The RRS», creo que el peso de AC / DC es evidente… ¿Qué influencias principales podríais citar? ¿Son comunes a todos los miembros de la banda?

Pues mira, curiosamente, mi idea principal era darle un toque más a Saxon pero vaya… que si recordamos a los AC/DC, tampoco me molesta, eh! (Risas).
En cuanto a nuestras influencias, son realmente dispares. Creo que el más rockero puro soy yo. Fer es muy de Toto y del rock progresivo, Tony es un loco de Queen, Esteban, al ser más joven, tira de Soundgarden y Dave Matthews Band y Chris, supongo que por sus raíces, tiene muy marcado el sello country rock y opta por gente como Eagles y Steve Ray Vaughan aunque le encantan los Stones y Los Beatles.

Hay un tema, «My Rock & Roll Addiction», en el que no os cortáis un pelo. Con una letra trufada de referencias a nombres como Whitesnake, Rainbow, Led Zeppelin, Iron Maiden, Deep Purple, Judas Priest, Thin Lizzy o Motörhead… Marcando territorio, ¿no?

Una de las cosas que tenía claro cuando empecé a construir a “la bestia”, fue que homenajearía a mis bandas icónicas de una forma u otra. En este caso, «My Rock & Roll Addiction» es un pequeño tributo a todas esas bandas que nos influyeron en nuestra rockera juventud y que algunas, aún lo siguen haciendo. Por ejemplo, en «The Way», homenajeamos a Joplin y a Hendrix. Siempre habrá algo en nuestras canciones que te recuerden o te lleven al sonido de una o otra formación.

Hemos disfrutado mucho con ellas y éste es nuestro tributo. Aunque debo decirte que no soy muy amigo de las bandas tributo. Eso de “imitar” a uno u otro artista o banda… no me gusta, prefiero hacer lo que nosotros hacemos: Yo te rindo tributo creando un tema que parezca o tenga un aire a algo que podrías hacer tú en un próximo álbum porque he crecido contigo, escuchándote y disfrutando con tu rollo pero hacer lo que tú ya has hecho antes y tratar de reproducirlo exactamente… no me va.

No falta el baladón épico, «Looking For A Chance», con ecos a Bon Jovi en las partes vocales y Aerosmith en la estructura de la canción…

Si, si, evidentemente. Eso lo tenía clarísimo: El baladón a lo «I Don’t Want To Miss Thing” de Aerosmith o «Always» de Bon Jovi, no podía faltar. La de los Aerosmith me marco a finales de siglo cuando la escuché en la peli Armageddon, y tenía claro que quería crear algo así: Grande, épico y con orquesta de fondo. La verdad, me siento muy contento con el resultado conseguido. Además, Chris la defiende maravillosamente bien.

Hasta el momento habéis editado siete sencillos con su correspondiente vídeo que se pueden ver en YouTube. ¿Tenéis pensado editar en formato físico? Y si es así… ¿Cuándo estará disponible?

Dejando de un lado el tema videoclips que, desafortunadamente, también los hago yo y Dios no me ha dado para todo (Risas), te diré que ahora en junio, editaremos nuestro octavo single y en estos tiempos que corren, Spotify ya considera LP un trabajo con ocho canciones pero por no ser patillero, si todo va bien, en septiembre, editaremos nuestro primer álbum con una novena canción. Será una versión unplugged de precisamente, «Looking for a chance».

Y no, lamentablemente, no editaremos en formato físico porque cuesta una pasta y no poderlo defender en directo, es tirar el dinero. Si te fijas, ¿Por qué crees que editamos cada tres meses? Pues porque es cuando cobramos la doble! (Muchas risas)!

(Risas) ¡Malos tiempos para la lírica! Para finalizar… Afirmáis que no vais a ensayar ni a tocar en directo, que se trata solamente de una banda de estudio… A ver, ¿no os pica realmente el gusanillo de subir a las tablas? Aunque sea para unas pocas veces… (Risas)

Particularmente, a mí no. Hace unos diez o doce años, me peté Barcelona ciudad con un proyecto pseudo country pop rock a base de pequeños bolos en formato trío que pretendíamos ir de The Eagles y parecíamos más bien Los Panchos con toques de humor. Eso sí, lo pasamos cojonudamente. Que por cierto, mi guitarra solista era un joven llamado Aleix Lozano que ahora lo está petando con su banda The Grassland Sinners y que espero, que más pronto o más tarde, se venga para una colaboración. El resto, si a la edad que tenemos, aún tienen ganas de hacer bolos, allá ellos! (Risas). De todos modos, y ahora hablando en serio, Esteban y Tony se pegan unas buenas palizas con sus otros proyectos. Los aburguesados somos Chris, Fer y yo. De todos modos, ¡costaría una pasta juntarnos a los cinco! (Risas).

Manel Celeiro

Puedes escuchar sus canciones y ver los vídeos en su canal de You Tube

Más info en: http://www.therockandrollsociety.com