El tejano Dallas Burrow no solo tiene sangre india corriendo por sus venas, sino que asegura que en una noche de borrachera, su padre Mike, John Lomax III y Townes Van Zandt hicieron un pacto de sangre, mezclando con sendos cortes sus castas. Cierto o no, hay en este álbum mucho del viejo Townes, pero también de Guy Clark, claro está, o de Billy Jose Shaver. Todo eso enfocado desde un prisma menos bucólico y más comercial, sin duda fruto de la producción e su colega Jonathan Tyler. El disco está bien. Muy bien. Y puede sonar igual en tu equipo en tardes de asueto que en una radiofórmula, y eso será algo que a alguien puede tirarle para atrás. A mí hace tiempo que no me afectan ese tipo de cosas. Así que he disfrutado el disco como creo que merece. Entres sus momentos top destacaría «X Old Flames» escrita por su padre, la versión de Van Zandt del «Mr. Mudd and Mr. Gold», ese temazo escrito a medias con su amigo Charley Crockett que es «Only GAme In Town» y, la joya de la corona, «Starry Eyes», una de esas canciones imbatibles. Venga, brizna entre los labios y a pincharlo.
Eduardo Izquierdo