Hablamos con Stavros Dzodzos, líder de la banda suiza Dirty Sound Magnet, que tienen nuevo disco en el Mercado, Dreaming in Dystopia, su sexto álbum grande.
Tenéis disco nuevo, Dreaming in Dystopia, me encanta el estilo de “Melodies from distant shores”. Qué sorpresiva la segunda voz, dota al tema de un efecto satánico muy guapo. El arpegio y los surrurros son terroríficos ¿Habéis pensado en dar miedo con la canción o quizá ese sonido tiene que ver más con el título del disco y el concepto de distopía?
Todo en esta canción se construye a través del contraste. La melodía ascendente es mayor y tranquilizadora y la descendente es menor y aterradora. Mi voz tiene calidez y presencia mientras que la voz de Marco, el bajista, es distante y oscura. Las letras de este tema están construidas de tal manera que este contraste es necesario. Queríamos expresar la dualidad del bien y del mal a través de voces y melodías.
En general el disco también busca esas texturas ásperas y la disonancia. Creo que estos movimientos hacen avanzar mucho el estilo del grupo, en la línea del concepto del titulo del álbum que decíamos antes, no obstante, en casi todos los temas las guitarras son acústicas o clean, un tratamiento muy diferente al de DSM-III que tiene más pedal y su sonido es más duro. ¿Qué efecto buscábais con esas guitarras?
Las guitarras son casi todas eléctricas, pero sí, casi no hay distorsión en todo el disco. En DSM-III la atención se centró en la energía y el poder, aquí la atención se centra en las canciones y la atmósfera. El anterior fue un álbum para volverse loco, mientras que éste es para flotar y soñar. Una vez más, nos gusta el contraste en la música. No queremos que todos los elepés sean iguales. Aquí las partes de guitarra son complejas y ricas y el sonido más limpio enfatiza la importancia de las melodías.
En el tema homónimo al disco me gusta el timing de aparición de las voces. En general la producción del disco es chula ¿Con quién habéis trabajado? ¿Con qué sello publicaréis el disco, con Hummus Records como los anteriores?
Produjimos todo el álbum solos. Con la experiencia que hemos adquirido grabando varios álbumes, sabemos exactamente el tipo de sonido que queremos lograr. Trabajar sin productor nos permite desarrollar nuestro propio sonido disco a disco. La mezcla la realizó un amigo de la infancia que conoce nuestro gusto. Es el ingeniero de sonido más talentoso que he conocido. Para mí, este es nuestro álbum con mejor sonido hasta el momento. En cuanto al sello, hemos firmado con el sello australiano Wild Thing Records.
Qué interesante el proceso de grabación que cuentas. En “Utopia” veo influencias de las bandas sonores de Morricone ¿Es así? ¿Qué otras influencias reconocéis en vuestra música? ¿Psicodelia y rock-prog tipo Pink Floyd? ¿La Velvet? ¿Roky Erikson?
Tienes toda la razón con Morricone. Antes de cada grabación, siempre suelo escuchar música suya. La emoción, melodías, sonido y textura de su obra es fabulosa y me inspira. “Utopia” tiene un estribillo que puede recordar a la música del spaghetti-western. De todos modos, creo que la influencia es inconsciente ya que no pensé en ello antes de grabar el tema. Aparte de eso, hay mucho rock progresivo psicodélico de los 60 y 70, es cierto. Led Zeppelin, Jethro Tull, King Crimson, Pink Floyd, The Doors, Frank Zappa, Black Sabbath, Beatles, Hendrix, pero también blues-rock. También tenemos algunas influencias más actuales, pero me gusta la variedad presente en aquellos años dorados.
Tenéis parada en Barcelona en vuestra gira de otoño ¿Habéis tocado alguna vez en España? Si és así ¿Qué experiencia tenéis de tocar aquí y del público?
Tenemos programada una gira española completa con 12 fechas justo después de Barcelona. Próximamente anunciaremos los shows. En el pasado hemos realizado tres giras por España. Siempre fue genial. Buen público, hermoso país y ambiente relajado. Tengo muchas ganas de volver y compartir nuestra nueva música con nuestros fans. Siento que la gente en España es sensible a las emociones de la música.
Quería preguntarte por la portada del disco anterior, DSM-III, me parece inquietante ¿Quién es el artista? ¿Cuál es el concepto que despliega?
Es un trabajo de tres personas. Nos maquillamos la cara, el bajista tomó una foto y Maxime, que es el diseñador gráfico de la banda, la convirtió en la portada del álbum. Siempre tenemos un concepto detrás de todo, pero esta vez solo fue que pensamos que se veía bien y coincidía con el contenido del álbum.
Cuéntame algo de la escena suiza, venís de Friburgo ¿Qué otras bandas interesantes actuales me puedes descubrir?
Honestamente, es muy difícil ser una banda suiza de rock progresivo y psicodélico. Luchamos mucho para construir nuestra carrera. Tuvimos que salir fuera del país para llamar la atención. No hay una gran escena aquí. Nos llevó mucho tiempo, pero ahora también tenemos público en Suiza. En Suiza hay calidad, pero en otros géneros. La música propia de nuestro amigo el mezclador de todos nuestros álbumes es muy interesante, se llama B77 y su propuesta es diferente a la nuestra, pero es posible que encuentres algo similar a DSM en la textura del sonido.
Texto: Pacus González Centeno