Nada menos que 25 años cumple Houston Party. Parece que fue ayer cuando se dió a conocer la promotora barcelonesa, bautizada a partir de aquella mítica estampa donde se entrelazaban raídos vaqueros con extremidades de músicos greñudos y groupies semidesnudas. Todo un hito para una casa —favorita de esta cabecera— que ha sobrevivido fiel a sus preceptos iniciales, organizando algunos de los mejores directos que hemos podido disfrutar en nuestro país, siempre con su intachable identidad por bandera.
Como la efeméride no es trivial, la celebración debía de estar a la altura del logro. ¡Y vaya si lo está! Nada menos que una mini gira de 4 conciertos en noviembre a cargo de The Music of BIG STAR, debidamente ilustrada por un precioso cartel colorista a cargo de la artista Coco Dávez. Un supergrupo con una alineación de auténticos All-Stars para revisitar el cancionero de la mítica banda de Memphis que lideraron los malogrados Alex Chilton y Chris Bell.
Capitaneados por el batería Jody Stephens, único miembro vivo de la formación original, esta versión póstuma de Big Star llegará a nuestro país con la presencia de Mike Mills (R.E.M.), Chris Stamey (DB’s), Jon Auer (Posies) y Pat Sansone (Wilco). Tan excepcional formación revivirá un repertorio inmaculado y sublime que está considerado fundacional de un género, el power-pop, donde se subliman las mejores armonías vocales (The Beach Boys, The Byrds), con el fulgor guitarrero de la invasión británica (The Kinks, The Beatles).
Big Star irrumpió fuera de tiempo en un lugar, Memphis, que había sido cuna de casi todo, desde los pioneros rockabilly al blues de Beale Street Green, pasando por el soul tamizado en Stax Records. Tuvo que ser el joven emprendedor John Fry, quien con la fundación de los Ardent Studios diera cobijo a una panda de melenudos enamorados del pop británico, una generación a la postre crucial para entender la música norteamericana de los últimos 40 años. Allí la prematura estrella Alex Chilton pudo saber lo que era una banda real —tras bajarse de los exitosos Box Tops— y en la figura de Chris Bell encontró a un cómplice (con el binomio Lennon-McCa como espejo) para imaginar un sonido frágil y melancólico, pluscuamperfecto.
Entre 1971 y 1975 la banda, completada por el bajista Andy Hummel y el batería Jody Stephens, dio forma a tres álbumes gloriosos (incluidos en 2003 por Rolling Stone entre los 500 mejores de la historia). Su debut #1 Record fue un tratado sónico insuperable, construido por la obsesión de Bell, donde sus dos autores compartían autoría en canciones tanto de delicadeza extrema como de rabiosa furia eléctrica, todas ellas memorables: “Thirteen”, “In The Street”, “The Ballad of el Goodo”… Su continuación Radio City, ya sin Bell, llevó a un estadio más crudo su personal propuesta de perfección guitarrera, logrando una nueva tanda de himnos imperecederos: “September Gurls”, “Back of a Car”, “You Get what you deserve”, “I’m In Love with a Girl”…
Finalmente, con la banda en proceso de descomposición, aún hubo tiempo para que Chilton escribiera (con la única adición de Stephens como adlátere) esa inabarcable radiografía de decadencia setentera que es Third/Sister Lovers. Dicho elepé, maldito por antonomasia, fue gestado en un extraordinario y opresivo ambiente de creatividad por parte del autor que, en connivencia con el rapsoda Jim Dickinson y con la musa Lesa Aldridge de la mano, fructificó en una brutal colección de desoladoras y experimentales piezas: “Big Black Car”, “Holocaust”, “Kangaroo”, “Dream Lover”…
Ahora por fin, por primera vez en nuestro país, podremos enaltecer el culto a la antología de Big Star, gracias a una conjunción astral en 4 noches, históricas y a buen seguro inolvidables, propiciada por el conocido tino de Houston Party. ¡Brindemos pues!
Texto: Marce Becerring
Entradas a la venta mañana miércoles 21 de junio a las 11 horas.
