The Capaces lo han vuelto hacer, han facturado un nuevo trabajo discográfico repleto de rabia, crudeza y velocidad, todo ello aderezado con altas dosis de rock and roll sesentero, garaje, soul y western. El resultado es All That Is, su octavo disco que les catapulta a lo más alto del Olimpo del punk rock underground patrio. Martillo y compañía han sabido como reconvertirse para tener un sonido propio durante estas dos décadas.
Vuestro octavo trabajo discográfico viene repleto de novedades musicales, ¿ha sido intencionado o es parte de la evolución de la banda?
Cleve: Supongo que es una mezcla de ambas cosas, sumado a la magia de la creación artística. Generalmente trabajas en una dirección, derivada de la experiencia, el back up existente y lo que te apetezca hacer en ese momento, pero al final siempre hay un componente «misterioso» que no puedes controlar y que te da el empujón definitivo de una forma natural. De todas maneras, en nuestro anterior álbum Zoetrope ya se apuntaban elementos que se han acabado de desarrollar en este disco.
Sí que es cierto que en Zoetrope ya se marcaba el cambio de tendencia pero aquí lo confirmáis y lo hacéis como algo permanente en el sonido de la banda.
C: Sí, es posible que sea permanente, en el sentido que ahora el nuevo set list contiene altas dosis de los dos últimos discos, aun manteniendo ciertos «clásicos» de la banda. Podría decirse que actualmente tenemos un repertorio con una muy interesante variedad de dinámicas, lo cual lo hace muy atractivo tanto a la hora de tocarlo, como a la hora de escucharlo en directo, que es donde una banda demuestra lo que es.
Algunas de esas novedades es, por ejemplo, “At Dawn” parece un instrumental sacado de una banda sonora de Ennio Morricone.
C: Te agradezco esa comparación con el enorme Ennio, del cual, obviamente soy muy fan, de hecho esa era mi intención y por lo tanto, es un gran elogio. Pero, en realidad, justamente eso no es muy novedoso, ya que a partir de For Good (2014), nuestro quinto álbum, ya empecé a incorporar ese tipo de instrumentales a modo de intro o cierre. «Dead woman» y «Dead man» de Neil Young, ambas en For Good (2014), «Uncertain skies» en Rawness (2018) y «Solstice» en Zoetrope (2021) son piezas de una atmósfera spaghetti/westerniana en la linea de «At dawn» la pieza que abre All That Is ( 2023).
En “Sudden Burst” el rock and roll guitarrero se acompaña de un piano frenético onda New Bomb Turks o Jim Jones Revue.
C: Una vez más, vuelve a emocionarme esa comparación con tan magníficos combos, de los cuales sobra decir que nos encantan, son pura dinamita. Ciertamente, la canción la gesté a modo de cruce entre unos Doctor Feelgood más nerviosos de lo habitual y unos Stones pasados de speed (risas), al final el resultado es un temazo que contiene todo eso y algo más, pero con la esencia genuina de The Capaces. El piano frenético de Tabatha Puig, que hizo un gran trabajo en varios temas del LP, se acopla a la perfección, fue un arreglo que pensé desde el minuto cero, y permite abrir nuestro espectro sonoro.
Sin olvidar el punk soulero de “Witch”, con dos saxos tenores y hammond también de fondo.
C: Tu lo has dicho, ¡punk soulero! Me gusta mucho que provoque esa sensación, es justo así es como lo sentimos. Llevaba tiempo queriendo hacer un tema a lo «Sonics» pero que mantuviera nuestro tono punk’n’roll añadiendo dosis de soul, más que hacer un copy-paste de su excelente onda garage-soul. Creo que al final lo conseguimos, es un buen pepinazo, que con la excelente aportación de nuestro buen amigo Pol «rocket» Padròs al saxo tenor (compañero en Shake!, nuestra banda de soul paralela) y otra vez Tabatha, aquí en el hammond, supura justo esa mezcla de estilos hermanos.
Y el clásico sonido de la banda manifestado en «Danger» y «Aimlessly».
C: Puede ser, pero con matices. En «Danger» incorporamos también el saxo de Pol, y el estribillo es un poco «experimental». Respecto a «Aimlessly», el hecho diferencial es la intro a voz y guitarra, una cosa nada habitual hasta ahora en nuestras canciones, además de la aportación del piano en la base.
¿Teméis que los fans primigenios de la banda vean con resquemor el nuevo aperturismo musical?
Martillo: Creo que los fans de la banda, esperan de nosotros que no dejemos de ser un grupo con inquietudes y personalidad propia más allá de las etiquetas. Si es cierto que el abanico estilístico se ha abierto, cosa que por otro lado consideramos absolutamente saludable y enriquecedor, pero nuestra esencia permanece inalterable. Ni nosotros/as, ni por supuesto nuestros seguidores, somos los mismos que éramos hace veinte años.
Tras dos décadas como banda, ¿qué sueño os queda por cumplir en la música?
M: Desde el primer momento que tocamos en directo, hemos ido cumpliendo sueños, incluso algunos que no nos hubiéramos imaginado. Por decirte un ejemplo, en su momento, hace quince años, compartimos tablas con Poison Idea, uno de nuestros referentes más importantes, y no solo eso, Jerry A. nos compró esa misma noche nuestro primer disco, y nos invitó a la gira del año siguiente; para nosotros eso fue algo realmente importante. Incluso, hace poco, compartió en su página oficial nuestro último videoclip «Monsters», y eso sigue teniendo mucho valor para la banda. Como sueño por cumplir, sería tocar en el Palau de la música de Barcelona. El punk, rock and roll y derivados deben de una vez por todas aparecer con normalidad en este tipo de escenarios.
¿Qué momento marcarías cómo el más relevante en la vida del grupo?
C: En una banda con tantos años de trayectoria, 25 el próximo 2024, más de mil conciertos y ocho discos es difícil de decir. Te diría dos, así a bote pronto: el primero conocer a Marta (ya desde hace muchos años convertida en Martillo, un referente total dentro del género) y crecer artísticamente junto a ella. Y otro más reciente, el tener desde un año antes de la grabación de Zoetrope a la formación mas consolidada de toda nuestra historia, cosa que nos permite disfrutar como nunca de este ente llamado The Capaces.
Texto: Rafa García-Moreno
Fotos: Mikel Solitario