Encuentros

Maria Jaume, luminosidad pop

La mallorquina Maria Jaume ha decidido dar un giro a su música, lanzarse al mar de una sonoridad diferente para su nuevo disco Voltes i voltes. Con ello se aleja del sonido de Fins a maig no revisc, su anterior trabajo. Aun así, lo que no ha cambiado es su querencia por contarnos historias, vivencias, experiencias propias y ajenas de una manera directa, delicada y exquisita. Con ella hablamos de su nuevo disco y de su música.

Tu primer disco sonaba más folk y este es más pop, ¿es buscado este cambio sonoro?

Sí, quería dar un paso hacia una sonoridad mucho más pop y dejar un poco atrás el folk. A pesar de que no desaparece del todo en este disco, con canciones como «Procés natural» o «Com te n’has anat?».

El título Voltes i voltes, ¿tiene que ver con las contradicciones que a veces aparecen a tus letras? ¿Unos versos que dan un poco la vuelta a las letras?

Quizás un poco sí. Dentro de las canciones a veces estoy dando vueltas a un tema que no se acaba resolviendo o que acaba allí donde ha empezado. El disco entero también es una vuelta o un proceso de cómo sales de una relación, cuanto más o menos te vas curando y como también te vas permitiendo entrar dentro de otra. El concepto de las vueltas aparecía demasiado para no aprovecharlo.

¿Es este un disco menos autobiográfico y más ficcionado? ¿En qué te inspiras para crear tus canciones?

Es mucho más ficcionado que autobiográfico, ¡sí! Siempre me inspiro en historias próximas, cosas que me explican los amigos, intervenciones espontáneas de desconocidos y también en historias propias o trocitos que sí que me han pasado. A partir de aquí, en este disco he querido estirar el chicle hacia donde me interesaba o me pedía la canción en aquel momento. Esto me ha permitido huir de la realidad y de la fidelidad a la historia real y he podido tener mucha más libertad a la hora de hacer letras más irónicas o surrealistas.

¿Qué nace primero, la melodía o la letra? ¿Cómo es tu proceso compositivo?

En este disco ha ido muy unido. Normalmente, me viene una melodía a la cabeza y mientras intento sacar una progresión de acordes que me guste, también voy probando letras que rítmicamente me encajen. Es un proceso cambiante que con los días se puede ir transformando y acabar en un lugar diferente de dónde ha empezado.

Lluís Cabot, del grupo Da Souza, se encarga de la producción. ¿Qué ha aportado a tu música? Y ¿por qué lo escogiste a él para producir el disco?

Tenía muchas ganas de volver a trabajar con Lluís después de que produjera «Un bon berenar». Es una persona con quien tengo mucha confianza y esto nos permite trabajar muy abiertamente desde el principio. Como fan de Da Souza que soy, quería que Lluís aportara esta frescura, este pop y estas ganas de jugar tan característica de sus composiciones a Voltes i voltes, quería poder jugar sin ningún miedo y también decir la mía en todo momento y con él este proceso ha sido muy fácil y agradecido.

Has grabado con Víctor Ayuso de Renaldo&Clara, ¿qué ha aportado también a tu música en este disco?

Creo que Víctor ha aportado lo que íbamos a buscar al grabar con él, una sonoridad pop, próxima a Renaldo&Clara que tuviera algún toque más mainstream, pero que también se pudiera atribuir a un pop más atemporal.

Hay dos colaboraciones al disco. «A final de mes» con Núria Graham y Miquel Serra en «Tombats en es sol». ¿Cómo surgen estas dos colaboraciones y que han aportado a tu música?

Surgen sobre todo porque los dos eran colegas y ya había colaborado de alguna otra manera.

Con Miquel, había colaborado en dos conciertos donde había invitado a amigos. Es un músico que hacía tiempo que escuchaba y admiraba profundamente, a menudo me inspiraba en temas suyos para hacer de propios y en este disco tuve muy claro que quería hacer una canción para que colaborara. ¡Cuando la tuve acabada se le envié y enseguida aceptó!

Núria me hizo de batería a principios de la gira de Fins a maig no revisc. Cuando estaba haciendo el disco, la canción de «A final de mes» bailaba por allí y no sabía hacia dónde llevarla. Cuando pensé en Núria para hacer una colaboración en el disco, con Lluís enseguida pensamos en esta canción para así poderle dar un estilo más próximo al indie rock o al rock alternativo.

Diría que los dos han aportado serenidad y mucha personalidad a los temas, puesto que tienen voces y estilos muy reconocibles.

Al final del disco, pero escondida de los créditos, está la canción «Un bon berenar», que publicaste el año pasado. ¿Por qué está escondida?

Es una canción que quedó como una seta entre un disco y otro. Sentía que no acababa de encajar con la sonoridad y el estilo de Voltes i voltes y haciendo pruebas para incluirla se me hacía muy extraño y no me acababa de convencer. A la vez, pero es una canción que me gusta mucho y que me daba mucha pena que no fuera editada nunca en físico. Por este motivo es el hidden track del disco, como un caramelito cuando te piensas que ya todo ha acabado.

Fins a maig no revisc, es tu primer disco. ¿Qué diferencias has encontrado entre los dos trabajos a nivel de grabación?

Ha sido bastante diferente. En el primer disco tenía muy poca experiencia y también tenía las cosas poco claras (risas). A pesar de que disfruté mucho del proceso de grabación, no formé tanta parte del proceso de arreglo y producción, fue seguir mucho la corriente y guiarme mucho por el instinto y también por Pau Vallvé. En Voltes i voltes he formado parte de todos los procesos, aunque lo haya arreglado y producido Lluís Cabot, he estado allí en todo momento, he metido mucho la mano y he dicho la mía cada minuto. Esto me ha permitido aprender mucho más también y estoy muy contenta.

Ahora que el disco es menos acústico y más eléctrico, supongo que tus directos cambiarán. ¿Cómo serán estos conciertos?

Sí, esta gira iré acompañada de Joan Vallbona a la guitarra eléctrica, Lluís Cabot al bajo, Joan Torné a la batería y yo tocaré la guitarra acústica. Estoy muy a gusto con ellos y creo que es un directo muy real, donde las canciones se pueden transformar y que se puede disfrutar de manera diferente al disco.

¿Cuándo tuviste claro que querías dedicarte a la música?

¡Claro todavía no lo tengo! (risas). Supongo que cuando vi que con mi primera gira me iba muy bien y más o menos me podía ganar la vida empecé a pensar en la música como una profesión. Estoy muy cómoda ahora, pero creo que es muy difícil conseguir una solvencia y continuidad dentro de un mundo tan precario como es este. De momento me encantaría poder continuar así muchos años, ¡pero nunca se sabe!

¿Cuáles son tus referentes musicales? ¿La música que más has escuchado?

Diría que son muy amplios y que todos ellos influyen de alguna manera a la música que hago. He escuchado mucho a Julia Jacklin, Nick Drake, Antònia Font, Julieta Venegas, La Oreja de Van Gogh, Courtney Barnett, Sufjan Stevens, The Magnetic Fields, Andy Shauf, Hether…

¿Y el primer recuerdo musical que te viene a la cabeza?

Escuchar y cantar con mi hermano Antònia Font en el coche desde que tengo conciencia y saberme todas las canciones desde muy pequeña.

Texto: Anabel Vélez

Fotos: Manuel Groc

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