Ya habíamos escuchado permutaciones similares por parte de nuestro venerable crooner. Mejor que lo reciente de sus ex compañeros de Alcatrazz, pero un escalón debajo de lo lanzado con escuderos como Impelliteri o Joey Tafolla, Day Out in Nowhere vuelve a traernos al Graham Bonnet más neoclásico y canónico, en un molde muy cercano a lo hecho en Alcatrazz en tiempos de Malmsteen, y eso siempre será cosa buena. Es un placer escuchar a Bonnet y su privilegiada garganta en terrenos familiares como «Brave New World», «When We’re Asleep» o la jugada de apertura de «Imposter». Pero lo mejor es el cierre de esta colección con «Suzy», una clausura con clase, con Graham Bonnet vocalmente desnudo derrochando humanidad sobre una pieza orquestal sobria a la vez que emocionante, traje a medida para un dandy de época.
DANIEL RENNA