Sensacional velada la que ofrecieron Vandoliers como arranque de su gira hispana en una Sala La Textil que presentaba un buen aspecto – algo más de media entrada – a pesar de la cercanía de la finiquitada XX edición del Azkena Rock Festival, a la cual habían asistido muchos de los presentes. El grupo salió a matar, desde el primer momento. Y eso se nota. Su propuesta es original. Fronteriza, pero no demasiado. Punk – ellos vienen de esa escena en su Dallas natal-, pero no en exceso. Alguien los definió como “Flogging Molly llevando Stetson” y los nombres de Dropkick Murphys, Mariachi El Bronx, Piñata Protest o incluso los patrios Th’Booty Hunters flotaban en el ambiente según las inclinaciones del show. Festivo a más no poder, no hay como pasar una noche de martes con temas como «Rolling Out» de The Native (2017), ese «Miles and Miles» que abría su Forever (2019) o su aplastante versión del «500 Miles» de The Proclaimers. Disfrutaron e hicieron disfrutar. Y, sobre todo, pusieron la semilla para que la próxima vez que pasen por nuestro país vayan llenando salas. Es lo que merecen.
Antonio Aguilar