El sexagenario británico Gary Anthony James Webb lleva más de 40 años mirando hacia el futuro. Su paso por Tubeway Army, así como su todavía latente carrera en solitario, iniciada en 1979, le confieren una envergadura histórica enorme. Su nombre aparece en letras mayúsculas en la génesis del synth-pop y del rock electrónico más oscuro, influyendo enormemente en los Nine Inch nails de Trent Reznor o en Marilyn Manson, entre tantos otros artistas experimentales y oscuros. Su enésimo trabajo de estudio, Intruder (Numan Music, BMG. 2021), señala al ser humano como culpable de la destrucción del planeta, así como creador de su propia trampa. Un álbum distópico y muy oscuro, conceptualmente, pero también en cuanto al enfoque sonoro y de producción. Un disco sólo al alcance de un artista pesimista, trabajador y ajeno a tendencias musicales (que no tecnológicas), que sigue en plena forma. Estará en España el próximo 11 de junio en la sala Razzmatazz 2 de Barcelona.
Después de tantos años y discos, ¿dirías que tu necesidad creativa alimenta tu música? ¿O tal vez, tan solo se trata de ti observando el mundo y de lo que necesitas decir al hacerlo?
Creo que escribir es tanto una necesidad para mí como un pasatiempo o una profesión. Quizás incluso algo más. Es mi forma de lidiar con las muchas preocupaciones y miedos con los que todos vivimos día a día. Escribo canciones, y eso significa que pienso muy detenidamente en esos miedos y preocupaciones para poder expresar las cosas con precisión. Eso, en cierto modo, es lo mismo que hablar con un amigo, o incluso con un terapeuta. Es como una válvula y me permite una vía, una vía de escape, para todas esas preocupaciones. Obviamente, observar el mundo es una gran parte del origen de esas preocupaciones, por lo que todo está conectado.
Como pionero en el uso de tecnología en la música, ahora que toda esa tecnología está en todas partes, ¿cuál es tu análisis al respecto?
La tecnología está en constante evolución, por lo que es un viaje interminable hacia el futuro. No se trata de que lo que teníamos antes ahora esté más disponible para todos, porque cambia constantemente. Algo bastante vanguardista hace unos años, está ridículamente desactualizado y pasado de moda ahora. Estar involucrado en un tipo de música que se basa esencialmente en la tecnología significa que debes aceptar que las cosas siempre avanzarán. Requiere mucho estudio, comprensión y adaptación constante. Sin embargo, detrás de todo eso, y esa es la parte más vital, está la capacidad de poder escribir una buena melodía. De nada sirve toda esa tecnología sin una buena sintonía.
Y siguiendo con el tema de la tecnología, ¿podrías contarnos cómo han influido en tu proceso creativo los enormes avances en instrumentos virtuales y software de grabación?
No tengo ningún sintetizador de hardware (físico) en mi estudio ahora. De hecho apenas tengo equipo. Sin bancos de teclados, sin racks de procesadores y efectos externos. Mis sintetizadores son todos virtuales, controlados por un pequeño teclado controlador que no tiene sonidos propios. Eso alimenta un ordenador que contiene una gran montaña de sonidos, todos sorprendentes y todos controlados por una gran pantalla táctil. Sin escritorio como tal, prácticamente sin partes móviles. Parece increíblemente poco impresionante cuando lo ves, casi una habitación vacía, pero es el estudio más poderoso y capaz que he tenido.
Evidentemente, el «intruso» es el ser humano…
Sí, básicamente. Nos veo como el enemigo del planeta. Los ingenieros de nuestra terrible e inevitable extinción.
Tus letras indican que te sientes realmente pesimista hoy en día. Definitivamente y como preconizaba el punk del que eres coetáneo, ¿no hay futuro?
La cosa es menos si sobreviviremos o no, sino si lo merecemos. Por tanto, no se trata realmente de ser pesimista u optimista cuando se trata de cómo estamos destruyendo el planeta o tratando de salvarlo. Simplemente no deberíamos estar aquí. Somos uno de los raros errores de la naturaleza. Somos demasiado curiosos y demasiado egoístas, demasiado codiciosos y demasiado inteligentes. Somos un cáncer, fuera de control y totalmente destructivo. El futuro del planeta estará perfectamente bien, tan pronto como se deshaga de nosotros. Si seguirá siendo algo extraordinariamente bello una vez que nos hayamos ido, eso es otra cuestión. Tiendo a pensar que le dejaremos un eco roto y distorsionado respecto a lo que solía ser. Pero al menos no tendrá que lidiar con nosotros.
En la era del reguetón y la llamada música urbana, ¿cómo te sientes acerca de todo ese nuevo mainstream? ¿Hay algo que encuentres interesante?
Me da un poco de vergüenza decir que ya no escucho mucha música, así que no tengo idea de qué está pasando o cómo se llama. Hago música, mi vida gira en torno a la música, pero no la sigo. No recuerdo la última vez que me senté a escuchar un disco, pero han pasado décadas. No puedo escuchar música sin tratar de analizarla y aprender de ella, por lo que escucharla no me resulta relajante. Si no estoy componiendo, trabajando en el estudio o de gira, realmente no quiero tener nada que ver con eso.
Cuándo te enfrentaste a la composición de Intruder, ¿buscabas algo en particular, o simplemente lo dejaste fluir? ¿Es esta tu forma habitual de componer?
Con Intruder quería hablar desde el punto de vista del planeta. Si la tierra tuviera voz, si pudiera hablar, ¿qué diría? ¿Cómo se siente acerca de nosotros y la forma en que lo estamos tratando? ¿Está enojado, decepcionado, desilusionado? ¿Quiere contraatacar? ¿Ya está contraatacando? ¿Es el Covid una de las formas en que está comenzando a contraatacar? Esa fue la idea, la razón para hacer el álbum, por lo que cada canción tenía que tener un elemento de eso. Sin embargo, no siempre tengo un tema fuerte para un álbum completo como lo hice con Intruder, pero es común. Para el álbum anterior, Savage, y otro previo, Splinter, había una temática específica en torno a la que fueron escritos.
La lista de grandes artistas influenciados por ti es larga y va en aumento. ¿Cómo te sientes al respecto? Debe ser halagador y abrumador.
Eso es extraño. Es halagador, mucho, pero evito que sea abrumador, simplemente porque estoy muy conectado a la tierra. Me miro en el espejo por la mañana y no veo una leyenda echando la vista atrás, veo a alguien asustado de entrar al estudio ese día por si no surgen las ideas. Alguien temeroso de estar a la altura de las cosas que esa gente ha dicho de mí. No tengo mucha confianza, en absoluto. De hecho, mi confianza es, en el mejor de los casos, frágil y es fácilmente dañable. Pero así es como quiero ser. No quiero prestar demasiada atención a las cosas que dicen esas personas, aunque estoy agradecido. Quiero sentirme asustado e indigno. Me hace trabajar más duro. Ese miedo es una poderosa fuerza impulsora. Cuando escribo algo, siempre pienso que debo ser capaz de hacerlo mejor que eso. Si pensara que soy especial, aceptaría todo lo que hice como genial tan pronto como lo escribo y no me esforzaría por encontrar algo mejor.
¿Te ves alargando tu carrera hasta donde tu cuerpo te lo permita, al estilo de The Rolling Stones?
En realidad no. Sin embargo, es muy diferente para ellos. Salen de gira y tocan en grandes estadios con, sin duda, todos los lujos que puedas imaginar para que sea un momento divertido y libre de estrés. No es donde estoy yo. En la mayoría de casos sigo tocando en lugares mucho más pequeños, con camerinos de mierda que huelen mal y sin lujos, por apenas el dinero justo. No me puedo imaginar haciendo eso en mis 70 u 80 años. Es un trabajo duro viajar a de forma básica, como hago yo. Es agotador. Agotador y duro para el cuerpo. Además, me gustaría escribir novelas en el futuro, así que definitivamente veo un momento en que la música y las giras darán un paso atrás para darme tiempo para desarrollar las habilidades de escritura que espero tener. Por ahora, sigo amando las giras, así que no tengo prisa por dar un paso atrás en un plazo corto.
¿Alguna pista sobre lo que podemos esperar de vuestros próximos conciertos en España?
No soy un fanático de la nostalgia, así que no me detengo demasiado en el pasado. La gira es para promocionar el álbum Intruder y eso es lo que pretendo hacer. Pero tampoco ignoro el pasado, simplemente no es el enfoque en torno al que se basa el set. Sin embargo, puedo decir lo emocionados que estamos todos por venir a España a hacer estos conciertos. Es algo que he querido hacer durante mucho tiempo.
Texto: Daniel González
