No extrañará, a quien decida contactar con su música, el interés que están suscitando mucho más allá de estrictamente el territorio jazz. Monodrama superan fronteras, experimentan con sonidos y estructuras instrumentales. Prescinden de las voces pudiendo como pueden a base de sabiduría y química personal hacer hablar a sus instrumentos. Desde Madrid, Mauri Gómez, David Sancho y Alberto Brenes publicaron hace unas semanas su doble álbum Mndrmooaa (Everlasting), donde reinciden en ofrecer música contemporánea de muchos quilates. Alberto nos pone al día del trabajo realizado y de sus intenciones inmediatas. El próximo concierto será el domingo 24 de abril en el Rock and Blues de Zaragoza.
Álbum instrumental, alternando constantemente improvisación y jazz contemporáneo. ¿Donde buscáis la inspiración? Se aprecian grandes dosis de libertad formal, pero también un enorme trabajo de fondo…
Nuestras influencias realmente abarcan un abanico muy amplio. Este álbum es la consecuencia de casi diez años como banda, tiempo en el que hemos desarrollado distintas líneas de investigación. Puede que se vislumbre en el sonido nuestra faceta como improvisadores, pero lo cierto es que este disco tiene un trabajo considerable en la pre y la postproducción.
Y, aunque se os ha definido como practicantes de una suerte de terrorismo sonoro, se percibe a las claras una conexión entre vosotros que solo puede surgir de la diversión, del disfrute. ¿Unís lo terrenal con lo espiritual y las buenas vibraciones?
Lo de terrorismo sonoro es algo que en algún momento mencionamos, pero no nos referíamos al contenido, consideramos que nuestra música es bastante amable (en general) para lo que hay por ahí. Hacíamos la broma de que el disco es un acto de terrorismo por su longitud (77 minutos), ya que en estos tiempos que corren, de atención dividida y limitada, lanzar un disco así sobre la mesa es más o menos como tirar un guante a la cara para batirnos en duelo con la luz del alba.
No descartáis, tampoco, añadir toques electrónicos. ¿Existe algún limite instrumental o estilístico en vuestra concepción musical?
Probablemente no, está por ver que puede ocurrir… el ritmo de reggaeton no tiene culpa de nada.
Reconocéis vuestra admiración por Radiohead, con guiño incluido en el título de uno de vuestros temas, pero creo percibir ecos de grandes nombres del rock progresivo como Van der Graaf Generator. ¿Existe un poso rock en vuestra formación como instrumentistas?
El interés por el rock puede resultar algo natural si te gusta la música. Su carácter y energía conecta con nosotros dejando una impronta imborrable que revierte positivamente incluso en la creación de otras músicas. Algunos no concebimos la vida sin King Crimson, Fugazi, Sonic Youth, Jane’s Addiction…
El jazz actual parece haber logrado salir del circulo de entendidos que lo seguía hasta hace pocos años. Un buen número de bandas y solistas están conectando con oyentes jóvenes, con personal que posiblemente desconoce la obra de grandes clásicos…
Pues eso es verdaderamente fantástico, hace falta siempre más apertura. Alrededor de la palabra jazz puede que haya cierto halo de esnobismo, una especie de estigma (lamentablemente para muchos) que ha hecho que una mayor audiencia, quizás por prejuicios, no se haya acercado por aquello de que «es que es una música muy rara y compleja y no entiendo nada y encima nadie canta, ¿pero qué es esto?, que me devuelvan mi dinero». Pero cierto es que el jazz es hiperpermeable, un ente en constante mutación y a día de hoy hay una cantidad salvaje de propuestas que harían que cualquier persona con ciertas inquietudes y sensibilidades conectará sin ninguna duda.
Mndrmooaa apareció a principios de año. ¿Qué acogida ha recibido? ¿Llegando a vuestra potencial audiencia? La crítica especializada se ha rendido ante vuestra propuesta.
Es cierto que la prensa le está dando mucho valor a nuestra música, lo cual agradecemos, a todo el mundo le sienta bien el reconocimiento a horas de trabajo y mucha ilusión. Ahora solo falta ir encontrando nuestro lugar, nuestra propuesta se separa de otras dentro del ámbito jazzístico de este país y lo que más nos urge es encontrar una agencia de management o de booking que entienda lo que hacemos y apueste.
Texto: Alfred Crespo
