Encuentros

Jorge Nunes, “probar con la cirugía cerebral me atraía, pero me daba reparo, así que opté por escribir”

La teoría nos llevaría a pensar que no hace falta presentar, a estas alturas, a Jorge Nunes. No en vano estamos hablando de un tipo que sigue liderando Los Brioles junto a su hermano Daniel. Algo que lleva haciendo desde 1986, y ahí siguen. Creyendo como pocos en el rock and roll. Hijo del cineasta José Nunes, a Jorge le ha entrado el gusanillo de las letras – aunque veremos que eso no es nuevo – y se ha lanzado con su primer libro, Las Gafas de Bo Diddley (66rpm Edicions). Por supuesto, nos cuenta como ha sido la cosa.

 

¿Qué te lleva después de 35 años metido en el mundo de la música a probar con la literatura?

La verdad es que probar con la cirugía cerebral me atraía, pero me daba reparo, así que opté por escribir. Llevo toda la vida escribiendo, y siempre he pensado que me gustaría publicar algo. Esta vez, gracias a la cuadratura de los astros, la cosa ha acabado en forma de libro.

La verdad es que no hay tanta diferencia, las canciones son como historias pequeñas, solo con alargar el argumento puedes tener un cuento, y si lo estiras, hasta un libro. En principio parece que la música tiene más que ver con la literatura que la carrera militar, ser obispo, carnicero o sexador de pollos…Solo en principio…

 

¿Cómo ha influido tu carrera como músico en este libro?

Mucho, bueno, más aún. Pero no solo mi carrera como músico, es mi manera de ver las cosas y las veo igual tocando que escribiendo o yendo en tren. Mi mundo (el bonito) es ese. Todo lo que sale en el libro de una manera u otra ha moldeado mi música porque es lo que ha ido moldeando mi vida. Siempre he sido muy heterodoxo musicalmente, no iba a dejar de serlo al escribir. Hago las cosas como me salen, sin planearlas mucho, sin preocuparme de si cuadra o no cuadra, pero sabiendo siempre, más o menos,  hacia donde voy.

 

Todo tiene algo de lisérgico en el texto ¿no? ¿Qué tomaste para escribirlo?

A mí no me parece tan raro, después de todo, tiene planteamiento, nudo y desenlace (risas) como una de ladrones y serenos. Entiendo que hay gente a la que si un día detrás de la A no le pones la B, puede sufrir graves desarreglos psíquicos y físicos, pero pueden estar tranquilos, en realidad la B sigue en su sitio. Tomé lo que tomo siempre, café, vino, cerveza y agua. Ya te digo, la B, aunque pueda parecer que no, siempre anda por ahí detrás de la A.

 

Bo Diddley, muñecos, Hollywood, enanos, Eddie Cochran, gitanos, hipnotismo…Que no te pusiste muchos límites está claro ¿no?

No, claro, pero es que para mí todas esas cosas están muy relacionadas, al menos en mi cabeza, que es la que tengo y uso. Debe ser que al ser lo primero que publico, he querido meter muchas cosas de las que para mí son necesarias, otras muchísimas se han quedado fuera. Como dice mi amigo Ernesto, no sale ni un solo marciano.

 

Si tú tuvieras que decir de qué va el libro ¿qué dirías?

Además de un libro de autoayuda, es una historia sobre un señor que busca una canción que no puede recordar. Esa búsqueda le lleva a un sitio raro lleno de personajes e historias distintas que le hacen descubrir que lo que de verdad buscaba ya lo llevaba encima. Viene a ser una especie de viaje iniciático. Buscando algo descubres otro algo más importante. Cosas de las gafas

 

¿Por qué tomar como título Las Gafas de Bo Diddley?

Esta pregunta se responde leyendo el libro, si la contesto le quito emoción al asunto. La cosa es que las llevas o no las llevas. Además es bonito, suena bien y leer Bo Diddley, siempre reconforta.

 

Acabas el libro con una playlist. Imposible separarte de la música ¿no?

Desde luego, podría separarme si fuese una afición o un hobby, pero es mi yo, así que,  música o lobotomía. Es una lista de las canciones que suenan durante la historia, o sea, no está puesta ahí al tun tun. Si hubiese escrito algo sobre el consumo de percebes coreanos durante la guerra de Crimea, la lista sería distinta, o igual no habría, pero en este caso era necesaria. El libro sin música no existiría, y eso sería terrible para la humanidad en general.

 

No sé si preguntarte o no si habrá segunda parte pero vamos a ello ¿la habrá?

No creo, igual tercera, pero segunda no. Igual algo parecido pero no igual.

 

¿Cómo engañaste al editor para publicar tu libro?

Diciéndole la verdad, se lleva poco, pero a veces resulta.

Eduardo Izquierdo

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