Encuentros

Jodie Cash, siempre libre

Pese a su juventud la vocalista barcelonesa lleva a sus espaldas una larga trayectoria y se ha curtido en todo tipo de escenarios. Su voz es bien conocida por los amantes del country y el rock norteamericano y con este nuevo disco ha afrontado el paso de dejar el inglés para cantar en castellano. Sin problemas, pese al cambio de idioma en Mil Noches mantiene sus señas de identidad musicales y, además, ofrece una mayor capacidad de comunicación con el uso de la citada lengua.

Un disco ambicioso, de largo recorrido, y en el que también se aprecian influencias e inquietudes musicales que van un poco más más allá de esas raíces características en su carrera. Artista de raza, Jodie nos deja la sensación de tener la ilusión viva y el espíritu libre. Dejemos que nos cuente…

¿En qué momento decides finalizar Jodie Cash Fingers y dejar solo tú nombre? En el fondo no hay muchos cambios de orientación musical, ¿no?
No fue un momento ni un motivo concreto, fue un sentimiento que se fue haciendo mayor a medida que fue pasando el tiempo, algo que necesitaba hacer, pasar página y aprender cosas nuevas, vincularme a otros sonidos, trabajar con gente nueva… nada que no le haya pasado a cualquier artista en algún momento de su carrera.

Creo que más que cambios en la orientación musical han sido más a nivel ‘espiritual’. Pero sí ha habido cambios en la manera de componer, por ejemplo, incluso en el sonido que teníamos y el que tenemos ahora.
Con JCF era todo más old school, con pinceladas de rockabilly, teníamos un directo de alto voltaje, aunque siempre dejáramos entrever los lazos que me unen al country. Y con Jodie Cash, en donde siempre hemos estado Toni Espelta, Toni del Amo y yo, hemos ido dando forma a ese fuego que teníamos con coros, fusiones varias y arreglos más específicos. Además de que llevamos tocando juntos desde 2017 sin parar hasta la pandemia, eso nos ha hecho coger una solidez muy buena como banda.

Y luego está el paso a cantar en castellano en este nuevo disco… ¿Qué razón te lleva a ello? ¿Cuándo decides que es la hora de hacerlo?

Esta sí ha sido una decisión conjunta, pues se tomó a lo largo del proceso de creación del disco entre los tres. Siempre digo que el castellano era una asignatura pendiente, pero nunca encontraba el momento de empezarla. Siempre he escrito, me encanta plasmar en un papel mis sentimientos y darle una cierta musicalidad en mi cabeza cuando lo hago, pero no pensando en una canción, más bien como recitando un poema.  Pero si quieres te adelantaré que la primera canción que escribí en castellano fue «Como un blues», del nuevo álbum, y fue uno de esos profundos sentimientos que me pedía a gritos salir en mi lengua materna.

Y ahí tenemos Mil Noches, no es tu primer disco pero sí el primero cantado en ese idioma. Has optado por la autoedición. ¿Es la mejor manera de trabajar en los tiempos que corren? Lo que está claro es que de esta forma tienes el control absoluto de tu trabajo…

Como bien dices, es la mejor manera de controlar tu trabajo y este que hemos hecho, está mal que yo lo diga, pero se merece un muy buen camino que recorrer. No voy a decir que no me gusten las discográficas, pero hay ofertas que no se pueden si quiera considerar, con lo que siempre será mejor la autoedición, sin duda.

El disco suena de lujo, no cabe duda de que es el resultado de mucho trabajo y que, para alguien que no te conozca, sea el resumen perfecto de tu trayectoria. Country, rock & roll y blues son los estilos en que te sientes más cómoda y lo demuestras de sobras en las canciones contenidas en el álbum. Por tu entorno familiar esa es la música que se debía escuchar en casa y con la que creciste. ¿Tienes claro que esos géneros son los que marcarán tu carrera? ¿Alguna otra influencia o estilo que te apasione?

En casa crecí sobre todo con Country y Rock & Roll, pero nunca hubieron puertas cerradas a otros estilos. Recuerdo que de pequeña me encantaba por ejemplo Rocío Dúrcal o Nino Bravo, y es que en mi casa se escuchaba y se tocaba sobre todo buena música, independientemente del estilo.
Cuando ya fui adolescente, que tuve mi buena época rebelde y me juntaba con un tipo de gente totalmente distinta a la que hoy en día me rodea, escuchaba muchísimo flamenco, rumba y r & b. Artistas como Queco, El Barrio, Destiny’s Child, Christina Aguilera o Camarón marcaron completamente una etapa de mi vida que años después no puedo obviar, pues esos recuerdos están ahí y es inevitable que sienta una atracción enorme por el flamenco, por ejemplo, porque es con lo que he pasado gran parte de mi adolescencia. Era curioso porque me encantaba el rock & roll, el r & b, el flamenco, las rancheras y todo eso formaba y forma parte de mí. Claro que entonces no era tan fácil admitirlo pues tendemos siempre a clasificar en grupos a la gente, y aunque nunca me he escondido de todo lo que conforma mi carácter, cuando era joven salía de fiesta con una música y lloraba o reía en casa con otra muy distinta.

Toni Espelta y Toni del Amo siguen a tu lado, pero por el disco desfilan un nutrido grupo de músicos aportando su detalle… Héctor Martín, Simone Lambregts, Ricky Araiza, Richard Da Silva, Lucky Dee, Adrià Sanz y Moisés Sorolla entre otros, además de sección de vientos y MIcky Forteza ayudando un poco en todo. Una alineación de lujo… ¿No habrá sido una tarea fácil coordinar todo eso? ¿Imagino que muy contenta de haber podido contar con todos ellos?

Contar con músicos profesionales y que además sean buenos amigos, es siempre maravilloso. Y como siempre digo: ¡tengo mucha suerte!
El tema de la coordinación costó un poco sobre todo por horarios de trabajos y demás, menos mal que Micky, que es un amor de persona, tuvo más paciencia que un santo en ese sentido… (Risas)

Todos esos músicos que mencionas más otros tantos como: Tüan D Bass, John Revell, Joan Mar Sauqué, Pedro Salazar, The Sparkles o Sesk Kpell y sin ir más lejos mis padres Chele y Estrella han hecho un trabajo de lujo en este álbum y no puedo estar más que eternamente agradecida…

 Las rancheras no te son ajenas, ya las has abordado en otras ocasiones pero la que usas para cerrar el disco, «Llama la Muerte», me parece preciosa y emocionante. Y tu voz se adapta de maravilla. ¿Qué tienen las rancheras que nos llegan tan adentro con esa capacidad para emocionar? Si te he de ser sincero a mí me encantan…

Siempre que pueda, habrá una ranchera como mínimo en mis discos porque, al igual que el flamenco, me encantan. Esta en concreto es de mi madre Estrella Cabrera, que para el primer disco ya incluimos «La ranchera de mi madre» y como tiene ese don para escribir canciones, para este álbum no íbamos a prescindir de él. Curiosamente la otra que es de mi madre, «Huella», que al final se ha quedado fuera porque la lanzamos como single bajo el sello Gateway Records de Nashville, es la que más flamenco le hemos metido en la mezcla, en donde las manos de Pedro Salazar hacen maravillas en la española que predomina en la canción. Yo creo que lo que nos atrae de géneros como el flamenco o las rancheras es la capacidad de hacer bello algo profundamente doloroso. En realidad somos seres que nos gusta sufrir de vez en cuando, evadirnos y hurgarnos en lo más profundo de nuestro ser para recrearnos en nuestra propia oscuridad.

La canción que da título al disco es un resumen de la vida del músico en una banda como la vuestra, las noches de carretera y furgoneta, la falta de sueño y la aventura de no saber qué vas a encontrar… ¿Alguna vez has pensado en que ya tenías bastante? ¿Qué ya estaba bien?

¡Uf, mínimo un par de veces al mes! (Risas) Que me apasione lo que hago y no pueda vivir sin ello no quita que sea muuuy duro y te juegue malas pasadas. Es una profesión que requiere una entereza e instinto de supervivencia abismal. No sólo material, sobre todo emocional. Si tuviéramos que medir las veces que nos sentimos valorados y recompensados con las que no, bajaríamos el telón cada semana.

Pero luego está esa gran bola de fuego en tu estómago que aclama salir y hasta que no la dejas te quema por dentro. Y cuando lo haces, te liberas, y es por eso que seguimos, por ese sentimiento de liberación en ese preciso momento, o al menos yo, claro. La última vez que estuve cerca de dejarlo fue al diagnosticarme quistes en las cuerdas vocales, hace un par de años, en donde me pilló una época de trabajo sin descanso brutal.

La guitarra española y las palmas que dan inicio a «Enemiga» pueden ser tanto una herencia de influencias flamencas como propias del sonido californiano de Laurel Canyon… ¿Qué me dices sobre ello?

Pues como te comentaba antes, el flamenco me apasiona, pero nunca había encontrado el momento oportuno para jugar con el estilo. Empezamos a trastear con la anteriormente citada «Huella», que el tema original, tal y como lo escribió mi madre, llevaba otro tipo de arreglos. Y lo mismo pasó con «Enemiga», cuando lo compusieron Toni Espelta y David López era más tipo ‘western’ y supongo que al re-tomarlo nosotros años después nos pedía ese sonido californiano, como bien dices, pero llevado a nuestro terreno mediterráneo.

«Como un Blues» y «Secuoya» son otros temas a destacar. Tu voz brilla especialmente en ellas, adaptándose tanto al blues como al country más campestre con una naturalidad asombrosa… ¿Es esa versatilidad una de tus mayores bazas?

Son dos de las canciones más especiales de este álbum y eso se nota. Además de que el blues y el country son unos estilos en los que estoy muy cómoda. Pensaba que me iba a costar mucho más de lo que al final fue por el hecho de ser en castellano, pero mira, al final cuando algo lo dices de verdad y transparencia, llega, sea el idioma que sea.

La única versión del disco es la que habéis escogido como sencillo, «Siempre Libre», adaptación de la famosísima «Take It Easy» que popularizaron los Eagles… ¿Qué tiene esa canción de especial para ti y por qué la habéis elegido como single?

Bueno, The Eagles es uno de mis grupos favoritos de todos los tiempos. Cualquier canción de ellos es especial.«Take it Easy» la canté por primera vez en el primer concierto de mi vida, con una banda de country-rock en la que estaba como segunda vocalista y es que simplemente me enamoré.
En el caso de este álbum en concreto, los Eagles tomaron un papel muy importante en su creación, pues salían cada dos por tres en ideas o arreglos que quisimos meter, el tema de los coros, que siempre me cuido de que estén bien conseguidos en mis discos, etc.

Hemos escogido esta canción para ser el primer single porque nos define perfectamente a los tres. Además es una versión que hemos tocado muchísimo, sobre todo un par de años atrás, en donde teníamos muchísimo curro y tocábamos tres noches por semana durante tres horas en un local de BCN para americanos, ingleses, alemanes, etc. Este tema siempre caía, daba igual qué tipo de público tuviéramos, es la canción perfecta para cualquier momento o lugar. Luego decidimos hacer su adaptación y ahí ya me costó más. Dar sentido a un hit como ese y hacerlo digno, no era tarea fácil.
Supongo que el mensaje ‘Siempre Libre’ me pareció universal y con un buen fin y sobre todo, es lo que a nosotros nos sugiere esa canción.

Antes comentábamos la cantidad de músicos que han colaborado en Mil Noches. ¿Cuál será la formación que llevarás en directo cuando se pueda volver a girar?

Pues mira, los que estaremos seguro seremos los tres guerreros al frente de este proyecto, a partir de ahí, el destino dirá. La idea es empezar una promo en acústico pero nunca se sabe de qué manera se puede desmadrar la cosa.

Para finalizar y relacionado con la anterior cuestión, una situación extraña la de tener un flamante disco en la calle y, por lo menos de momento, tener que quedarse en casa sin actuar… ¿Cómo se afronta esa situación?

Supongo que como cualquier empresario que se ha visto obligado a cerrar o pausar su negocio en esta ‘nueva normalidad’. Es duro pasar de no tener ni un día de descanso a la semana a tener uno o ningún concierto al mes. Pero los artistas somos supervivientes, nos adaptamos a los contratiempos, siempre lo hemos hecho, porque al menos en mi caso siempre se alberga la esperanza de que lo mejor está por venir y quiero pensar que esto en cualquier momento se dará la vuelta y la música volverá a tener el lugar que se merece en esta sociedad. En cuanto al disco, ¡espero al menos vender muchas copias!

Manel Celeiro

Fotos: Fernando López

Más info en: http://jodiecash.com/

 

 

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