Encuentros

Chus Navajo, muchas cartas por escribir todavía

Con mucha confianza y con el aplomo que le aporta la producción, arreglos y un montón de instrumentos de Candy Caramelo, ha creado las canciones más impactantes de su trayectoria. En la buena senda combinando destellos country, con toques folk-rock y con aromas al rock’n’roll argentino y de otros lares. Buenas historias, presentación y canciones para degustar que puedes conocer mejor en www.chusnavajo.com. En Cartas Para Seguir hay razones y canciones para seguirle la pista. También para charlar con él.

Desde Los Navajos hasta tu debut en solitario, con el interesante (aunque nos supo a poco) Mis Mejores Enemigos, hubo notorios cambios. Pero creo que es mayor aún el salto hasta este hermosos Cartas Para Seguir. ¿Casi podemos hablar de tu debut real en solitario?

Probablemente sí. Antes de entrar por primera vez en un estudio con Los Navajos, ya había tenido alguna experiencia de grabaciones más o menos caseras. Después arranqué mi andadura en solitario y publiqué Mis Mejores Enemigos, 7 canciones en las que yo mismo hice labores de producción. Fue un arranque que se culmina con este disco, en el que decido ponerme en manos de un productor y buscar un trabajo que consolide mis primeros pasos. 

Lo de en solitario casi habría que ponerlo entrecomillado. En tu primer disco, banda de acompañamiento. Ahora un Candy Caramelo que ha hecho casi de todo. Porque las canciones son tuyas, si no casi podíamos hablar de un dúo. ¿No te parece? 

En mi primer disco traté de reflejar el sonido con el que venía girando, con canciones en acústico y otras con la banda que me acompañaba. En este segundo trabajo me he sentado mano a mano con Candy Caramelo y una selección de 20-30 canciones muy en bruto, con la idea de buscar un sonido y un lugar que las definiera. Efectivamente el trabajo de Candy en el estudio ha sido enorme, implicándose mucho conmigo y con las canciones. Ha sido una suerte trabajar con él, me ha ayudado a crecer como músico y tengo que empezar por agradecérselo.

Cuenta un poco a la gente quien es Candy con quién ha trabajado. Pero que no se piensen que es argentino, ja,ja…

Jejeje. Es algo que le pasa habitualmente según tengo entendido. Yo conocía a Candy de haberle visto girando como bajista con Calamaro y más tarde con Fito. Candy tiene una trayectoria de más de 30 años tocando con todos los grandes del rock en España y casi de 10 años de productor, trabajando con artistas como El Twanguero, Isma Romero o el propio Andrés Calamaro. Es un músico polivalente, con mucho talento para los instrumentos, pero sobre todo yo me he encontrado una persona cercana que se preocupa por el artista y por la persona.

Temas como «Quieren Ser», tienen ese aire arrabalero y argentino que mola y que quizás tenga algunas influencias de esos monstruos con los que ha trabajado Candy como Andrés Calamaro o Ariel Rot.

¡Sin duda! Es una canción para la que buscamos darle un sonido especial ya que era la única que contaba una historia desde fuera y la letra nos pedía llegar a ese ritmo latino y desgarrado. La influencia del rock argentino está presente en el disco y era una idea que yo buscaba desde el comienzo de la producción. Calamaro y Ariel Rot han sido siempre referentes para mí a la hora de encarar las canciones y trabajar con Candy suponía un seguro en cuanto a seguir esa estela. Algunas canciones que se me vienen a la mente y han podido influir en este tema son «Donde manda marinero» o «Tuyo siempre» de Calamaro o «Colgado de la luna» de Ariel Rot.

 ¿Ha sido él quién te ha convencido para que la única versión del disco sea el «Pasemos A Otro Tema» de Calamaro? Además ahí hasta te ha hecho dúo.

Fue una idea que surgió directamente en el estudio cuando estábamos terminando la pre-producción del disco. Habíamos hablado mucho de Calamaro durante esas semanas y nos pareció bonito hacerle ese pequeño homenaje, además es una canción que a pesar de ser conocida dentro de su repertorio, la firma junto a Ariel Rot, por lo que tenía aún más sentido. Así jugando con la guitarra empezamos a probar canciones y me acuerdo que cuando me puse a cantar “Pasemos a otro tema” Candy me dijo: “¡Chus este tema parece más tuyo que muchos de tus temas!” Y ahí decidimos que esta tenía que ser la versión. Luego yo le propuse que la hiciéramos a dúo porque me parecía que tenía sentido como reflejo de la forma de trabajar que veníamos llevando, mano a mano en el estudio. 

 Hablemos también de las otras colaboraciones. Choca, para bien, ese trombón de Norman Hogue en «Quieren Ser». ¡Cómo surgió la idea y esta presencia?

Como te comentaba, esa canción nos pedía algo singular que nos ayudara a encontrar su aire retro, bailón y agarrado. Pensamos en un instrumento de viento y Candy me propuso llamar a Norman con quien tenía amistad desde hace años. Yo le conocía de haberle visto actuando con Andy Chango y me pareció un lujo. Así una tarde de agosto se acercó al estudio, charlamos, se sentó con su trombón y en unas horas y alguna cerveza, habíamos encontrado el broche que buscábamos.

Estupendo dueto de Núria Balaguer en la emotiva despedida con «En Aquella Canción». ¿Era necesaria una voz femenina para narrar esta historia? 

Quizás no necesariamente, pero me apetecía esa luz femenina estuviera presente. Aunque sobretodo me apetecía colaborar con Núria. Nos habíamos conocido durante la gira de mi anterior trabajo ,en un festival en Canarias, y enseguida habíamos conectado. Colaboramos juntos en uno de mis conciertos en Barcelona y allí entendí que su presencia en el disco iba a hacer crecer cualquiera de mis canciones. Cuando le propuse la idea me dijo que sí al momento, así que fue cuestión de buscar una fecha que estuviera de paso por Madrid con su grupo, Flor de Canela, y cuadrar unas horas para venir al estudio. Fue fácil y bonito, otro pequeño lujo del disco.

¿Has escuchado en los últimos tiempos a  Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán o Solera? Me parece que este cierre y algunos otros momentos denotan que son unos músicos que están también en tu onda…

No son artistas que escuche habitualmente, quizás en su órbita me ha gustado más gente como Enrique Urquijo o Duncan Dhu y puede ser que esa influencia se vea reflejada en esos momentos.

Siempre se habla de ti como de artista con muchas influencias country y folk-rock. Yo, sin ánimo de molestar, aprecio en tu tono de voz y en melodías tan logradas como las de «Vámonos», «Brote Demencial» o «Para Ellos», bastantes puntos de contacto con el mejor Loquillo maduro de discos como Balmoral. ¿Qué opinas al respecto?

No solo no me molesta sino que me halaga que me digas eso. Mis influencias country y folk-rock son más consecuencia de mi etapa reciente, donde para poder defender mis discos en directo, he actuado mucho en acústico con guitarra y armónica, encontrándome en el camino con artistas de esa onda que me han aportado mucho en lo musical. Loquillo es un referente del rock español al que respeto y valoro su tenacidad, su forma de caminar y de reinventar su sonido manteniendo su esencia.

Me ha encantado la lap steel de Caramelo, el tempo lento y la historia de «El Que Pierde Tiene Un Bar». Me recuerda al mejor Chris Isaak. ¿Qué nos cuentas en esta canción y que más cartas escribes a tus oyentes en este nuevo y definitivo disco?

Es una canción dedicada a los que pierden. La balada del disco es probablemente la que más se aleja de la vivencia emocional, para convertirse en una especie de canción protesta. Hablo de los que pierden pero no de perdedores, es una reflexión algo sombría sobre la injusta dicotomía de ganador-perdedor que impera en la sociedad actual, donde es casi imposible cambiar de bando. Creo que es injusto e inmoral que esto sea así, que haya personas que por el hecho de nacer en un lugar determinado o pertenecer a una clase social tengan que sufrir penurias mientras el resto les da la espalda para seguir con su “desarrollo”. Y las grandes promesas y expectativas de cambiar estas situaciones, suelen acabar en intenciones porque cuando nos toca de cerca todos tenemos miedos y prejuicios que nos terminan dominando. Es una forma de expresar mi crítica y autocrítica en forma de canción, que espero sirva de granito de arena. Un mensaje que necesitaba hacer público. Todas las canciones del disco tienen en mayor o menor medida esta característica de mensaje que necesito lanzar, para desquitarme y seguir con mi apuesta y mi camino.

En el disco solo tienes de seguido a Candy y a José Bruno en la batería. ¿Habrá conciertos de presentación? Si es así cuéntanos con qué formación y dónde informarse de ellos o cómo escuchar tus discos.

Estos dos monstruos han sido partícipes de la grabación el disco, quedando una producción con la que estoy muy contento. Ahora en directo salgo a dar vida al repertorio con los músicos que ya me venían acompañando desde hace 2 o 3 años y un guitarrista nuevo que acaba de incorporarse a la banda. Así el formato principal será de dos guitarras, bajo y batería. Haremos tres conciertos de presentación, 7 y 8 de febrero en la sala Contraclub de Madrid y 15 de febrero en el Alfa-Bar de Barcelona y después anunciaremos las fechas de la gira que arrancará en marzo y promete ser larga. Toda la información está disponible en mi web, www.chusnavajo.com y en mis redes sociales “@chusnavajo”. Mi música se puede escuchar en todas las plataformas digitales spotify, youtube… y sobre todo en los conciertos que son los que dan sentido a este caminar.

La música y las historias de estas nuevas canciones seleccionadas entre un montón de composiciones más se merecen que bastante gente le acompañe a Chus en el caminar de sus actuaciones.

Texto: Txema Mañeru   

 

 

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