Si bien el año está a punto de llegar a su fin, todavía se desvelan sorpresas gratas. Una de ellas es el debut oficial de Serpent, una banda con base en Barcelona, capaz de mezclar el sonido de Hot Snakes, Wipers y Stooges con melodías pegadizas y emotivas. Presentan Lluna Roja, un disco cantado en catalán y cargado de rabia eléctrica hasta generar su propia tormenta punk. Sus cuatro miembros son conocidos en la escena del underground nacional, pues provienen de formaciones como The Gundown, Col·lapse, The Anti-Patiks o Appraise. Han subido a los escenarios del prestigioso Actitud Fest y el sello Barcelonés BCore no les ha dejado escapar de su catálogo. Su trabajo puede cerrar este año, pero es seguro que abre un nuevo camino en el próximo. Hoy mismo sale a la venta.
Serpent es una banda en la que todos sus músicos forman parte de otras formaciones, entonces ¿Cómo o por qué motivo surge Serpent y cómo se forma la banda?
Inicialmente empezamos el proyecto Eric y yo, que estábamos tocando juntos en Col·lapse. Pero dicha banda ya estaba un poco en decadencia por falta de interés en general y a él y a mí nos llamaba la idea de hacer algo más abierto. Así que empezamos a quedar en los huecos de ensayo que dejaba Col·lapse y así le dimos forma.
Encontramos la primera referencia de Serpent en el 2017 con una demo homónima ¿cuál es la historia de esa demo que bautiza el proyecto?
Pues siguiendo la respuesta anterior. Esa demo la grabamos solo Eric y yo para tener algo apetecible que llamara la atención de un par de músicos más y así poder llevarlo al directo en todo su esplendor. Teníamos bastantes temas y queríamos registrarlos sin tener que pasar por un proceso de probar con gente, pensamos que era mejor tener la demo y luego buscar que al revés.
Esa demo tiene un sonido muy digno, incluso puede encontrarse en Spotify. ¿Por qué nunca se editó de una manera más formal? o mejor dicho, ¿Por qué no es el primer disco de Serpent ya que hay contenido suficiente?
La editamos en cinta (casette) a través de Pifia Records. En directo hasta hace poco tocábamos casi todos los temas y va a seguir siendo una parte de nuestro setlist. Son temas que nos gustan. Pero si es cierto que, al ser la primera referencia, no le pusimos tantos medios como en el siguiente LP. Y en cuanto a la duración. Siete temas configuran una demo larga, pero al ser larga también es más variada y define mejor qué tipos de temas podemos hacer. Además, no vimos ningún tema descartable.
El que sí se considera el primer disco de Serpent es LLuna Roja. ¿Qué tiene este disco que no tuvo la anterior referencia para ser un disco por derecho?
La diferencia es que el disco ya lo hicimos como banda más que como proyecto. Ya éramos 4 seres humanos en un local decidiendo los temas palmo a palmo, con la expectación de tocarlos en directo y con todo lo que conlleva ser un grupo. La entrada de Marc y de Fran ha sido el verdadero principio de Serpent, ya que con ellos ha llegado la posibilidad de tocar en directo.
Al oírlo pienso en bandas como Hot Snakes en el lado más agresivo, pero también hay un lado post-hardcore y ‘mas primitivo’ como vosotros mismos habéis definido. ¿Qué bandas son las que inspiran a este proyecto?
Bueno yo pienso que Hot Snakes (que es un grupo que en mayor o menor medida nos gusta a los cuatro) es un grupo con unas influencias muy primitivas. Stooges, Wipers, Black Flag, Wire… grupos que también son influencias para mí. Luego hay una parte más melódica y más emotiva porque nos gustan los estribillos de vez en cuando. Te podríamos decir muchos grupos y muy diversos ya que no somos gente que escuche exactamente lo mismo. Fran aporta más emocore noventero y de principios de siglo, Marc es más punk rocker y Eric que como es fotógrafo va a todos los conciertos a hacer fotos y escucha diez millones de grupos, así que todo suma.
El disco se ha editado con el prestigioso sello Barcelonés B-Core. ¿Cómo apareció esta posibilidad?
El disco en realidad es una coedición a 5 bandas, Bcore, La Agonía de Vivir, Pifia Records, Navalla y Saltamarges. Bcore ayuda mucho con la promoción del disco y la verdad es que se agradece mucho contar con ellos. La posibilidad apareció mandándole el disco acabado con la portada y todo y con que a Jordi le gustara y confiara en el proyecto, igual que a los otros sellos.
Habladme de la grabación y la mezcla, por favor. De nuevo surgen nombres como Ultramarinos y Victor García, además de Xavi Escribano (Malestar Social, The Anti-Patiks)
El disco lo grabamos con Xavi Escribano en el EM Estudi de Terrassa. Ya que habíamos ido a hacer la demo ahí y la verdad es que me impactó mucho la profesionalidad y la entrega de Xavi. Por eso repetimos con él. Porque podíamos ir a cualquier otro estudio con más “experiencia” y tal, pero también eres solo un proyecto más y tal como llegas te vas con lo tuyo. Sabíamos que con Xavi iba a ser diferente y realmente se implicó al 200%. Nos decía cosas como: “me da igual como os pongáis, de aquí solo saldrá un discazo”. Se ponía más serio que nosotros el tío.
El disco lo grabamos en una semana y pico. Y luego fuimos a darle el apretón final con Victor García, el apretador de ondas oficial del underground, y de parte del no underground.
Todo el disco está cantado en catalán, hay otras bandas, como Crim por ejemplo, cuya música ha roto fronteras idiomáticas y antiguos estereotipos de pensamiento y se ha abierto a Europa y Estados Unidos. ¿Creéis que aún puedan existir barreras de tal tipo a la hora de presentar vuestro disco o directo?
Queremos pensar que no existen barreras idiomáticas, al menos en el underground en el que nos movemos. Hay bandas buenas y bandas malas, no hay idiomas buenos ni idiomas malos. Lo mediocre y lo genial no depende de ningún idioma. Todo el debate que pueda generar el tema de la lengua suele tener los mismos ingredientes: excusas malas, modas de mierda, burbujas absurdas, mentalidades cerradas y complejos identitarios. En el caso de Crim, creo que lo que han hecho es brutal, porque tienen grandes influencias y muchísima personalidad, el idioma les da un plus en Catalunya, pero no juega a su favor cuando van a Europa (por ejemplo). Al final si les va bien es porque son buenos.
El único “problema” que te puede suponer cantar en un idioma minoritario es si lo mezclas con un contenido identitario. Eso puede ser que te traiga un beneficio en casa y un rechazo fuera, pero bueno, es el juego que muchos deciden jugar. En nuestro caso, como hacemos música para cuatro freaks y los freaks son una comunidad que se entiende más allá de fronteras e idiomas no nos preocupa demasiado.
En el caso de romper dichas barreras ¿Hay planes de girar fuera de las fronteras idiomáticas del catalán? Europa o Estados Unidos?
Europa seguro, aunque lo veo lejos porque no hemos tocado mucho hasta ahora, nos hacía falta un disco y ahora ya no tenemos excusa. Estados Unidos lo veo más lejano… quizás surge la oportunidad, quién sabe, aunque me da la sensación de que lo de tocar ahí es más anecdótico que real.
Siguiendo con el tema del idioma y las letras. ¿Cuál es el universo lírico de Serpent? Si mal no me equivoco, hay cierto punto de dolor y rabia en ellas…
La verdad es que nunca había hecho letras en catalán, y a veces me sorprende que la gente le quiera encontrar una lógica que no existe o un significado del que carecen. A la gente le asusta lo que no entiende e intentan engancharse a lo que creen entender con garfios. Yo creo que solo es rock ‘n’ roll, no es ningún ensayo filosófico ni poesía. Simplemente parto de ideas e intento degenerar el asunto con frases que me gustan, por sonoridad o por lo que sea. Hay significado, sí, pero está fragmentado y muy poco analizado. Me imagino que hay mucho subconsciente, pero tampoco me interesa.
De acuerdo con vuestra nota de prensa, el disco únicamente se edita en vinilo, de dos colores, por cierto. Si esto es del todo cierto, entonces: ¿Qué disputa abierta tenéis con el formato CD?
Esa es una pregunta que deberías formular al mundo, porque hoy en día nadie escucha música en CD. La cosa se ha polarizado y ya es Spotify vs. vinilo. Lo más digital contra lo más analógico. El CD ha quedado ahí en medio y las tiendas de discos que sobreviven están cada vez vendiendo más vinilo. Creo que en el grupo nadie compra CDs casi nunca. Somos más de vinilo, así que obviamente nos gusta hacer el disco que nos gustaría poder comprar y escuchar.
Habéis tocado en un festival tan de referencia como el Actitud Fest en Barcelona ¿Cómo surgió la posibilidad y qué respuesta ha tenido en la banda?
Habíamos tocado en anteriores ediciones con bandas que teníamos o tenemos. Col·lapse, The Gundown y Anti-Patiks hemos pasado por ahí. Y supongo que por veteranía y por “a ver qué han hecho estos ahora” Alfred escuchó la demo de Serpent y le flipó. Y por eso nos dijo de tocar. Y nosotros encantados porque es un pedazo de festival. La respuesta de la gente en general ha ido en crescendo, igual que nuestro directo supongo. Cuanta más confianza en el escenario a la gente más le gusta el grupo y nosotros lo notamos y lo apreciamos.
Aquí tenemos Lluna Roja, vuestro primer disco como Serpent, ¿Cómo lo presentáis a quien os está leyendo y qué motivos hay para escucharlo?
Pues no queremos vender nada, pero es un disco que puede entrar bien a la gente que le guste el rock, el punk o el hardcore. Bordeamos los estilos sin entrar en ninguno de ellos y además lo hacemos a nuestra absoluta bola.
Gracias, añadid lo que queráis.
Gracias a vosotros por esta entrevista, muy agradecidos de salir en un medio tan histórico como el Ruta 66, y sobre todo muy contentos de que os haya llamado la atención el disco.
Texto: Mario Silvestre
Fotos: Carolina Álvarez
