Veintiséis años tiene este tipo de Morgantown, Virginia Occidental que asegura que su primer disco, Seneca, “le dará a la gente una buena visión de lo que son culturalmente en Apalaches. Las personas tienen una visión desde el exterior de lo que somos, cuáles son nuestras prioridades y nuestra inteligencia”. Así debuta este tipo que, efectivamente dedica su primer disco a todo aquello que le rodea, influido musicalmente y según sus propias palabras por Shooter Jennings, Tyler Childers, Colter Wall, Luke Combs, Aaron Watson y David Allan Coe.
Hijo de una maestra de escuela y un minero, Godwin fue un chico normal, que quiso ser deportista, como tantos otros. De hecho pareció tener futuro en el fútbol americano, aunque cuando parecía que los tenía hecho con un equipo importante todos e fue al traste. Fue entonces cuando decidió coger una guitarra. Hace apenas seis años. Con ella se marchó a estudiar a Estonia donde pudo ver la realidad que se da más allá de las fronteras de su país, algo que le sirvió para poner en perspectiva su mundo más cercano. En 2015 decide dedicarse profesionalmente a la música y empieza por curtirse tocando en todos los lugares en los que le dejen, ya sea un bar de carretera, la parte de atrás de un camión o incluso la calle. Entra a formar parte del grupo Union Sound Trearty, pero dura poco. Necesita hacer algo más personal y eso es Seneca. Un disco que no puede dejar indiferente a ningún fan de la roots music, y que hace que su nombre aparezca marcado en rojo en nuestras agendas como personaje a seguir.
Eduardo Izquierdo