Y cuando nadie lo esperaba, en pleno mes de agosto, Lee Bains publica, de momento solo en redes, un sudoroso directo que, por supuesto, nos tiene babeando desde la primera vez que le dimos un orejazo. La cosa tiene su miga. En noviembre de 2017, un Bains tan preocupado por lo que le rodea como vimos en su entrevista en estas páginas, decide montar este concierto en su Birmingham de origen ante la posibilidad de que el juez Roy Moore, homófobo, cristiano radical y racista declarado se convierta en senador de Alabama. El músico necesita un medio para vomitar toda la agresividad que ese hecho le produce. Y eso es lo que hacen en un lugar en el que él mismo asegura que muchos tomaron sus primeras cervezas o, incluso, perdieron la virginidad: las paredes de The Nick. Como no podía ser de otra manera, el grupo se muestra aplastante, una auténtica apisonadora que combina las canciones con pequeños discursos a modo de introducción que nos sitúan en contexto. Actitud punk por doquier y muchas, muchas ganas de dejar constancia de toda su rabia. Para que luego digan que el rock americano es terreno de lánguidos.
EDUARDO IZQUIERDO