Es curioso que un grupo tan bueno como Vallarna, integrado por tres castellanos y un cántabro, haya tenido que ver como pasaban diez años desde su disco de debut, Km.90, para publicar un segundo trabajo. Eso sí, si aquel ya era un notable conjunto de canciones, este alcanza la categoría de excelente.
Un trabajo difícil, por estilo, pero altamente satisfactorio. Forjado a base de jotas, charros, corridos, polcas o charradas. Compuesto por maravillas como «Alborada» extraída de las tradicionales dulzainas segovianas, la zamorana «Al Romero Florido» o esa tradicional de la Tierra de Pinares castellana que es «Corrido de las Tijeras», con un excelente saxo de Carlos Soto que junto a la mandolina de Roberto Cubero (Los Hermanos Cubero) en «Polca de los Platillos» integran las colaboraciones del disco. Aunque la joya del álbum es «Me Voy por Verte» donde se unen dos jotas cántabras tradicionales con aportaciones propias para construir un tema absolutamente adictivo de espíritu casi pop. Solo queda pedirles que nos hagan un favor: que no tengamos que esperar diez años más para el siguiente.
Eduardo Izquierdo