Autores de uno de las más vigorizantes y actualizadores discos del mondo garagero en lo que va de siglo, y me refiero a su debut con Beat Stampede (2012), su secuela dos años después se renovó con toques de negritud, y este su tercer capítulo nos los presenta con un punto extra de madurez y manteniendo al mismo tiempo sus señas de identidad: estas se exponen meridianamente claras al inicio, con «None of your Bussines», así mismo con el tema que titula esta nueva entrega, en el que el sencillo diálogo entre la guitarra de Jack Sandham y las percusiones de Wednesday Lyle, sutilmente salpimentadas por toques de órgano, nos imbuyen en melodías ligeramente acalambradas. La preponderancia de ritmos vigorizantes se muestra en esta ocasión oportunamente quebrada, y enriquecida, por varios temas que exploran originales vías: la postrera «No Wrong» desemboca en su desarrollo en plegaria seudo gospel, la chica de la batería nos seduce las pocas veces que se acerca al micrófono, rayando a notable nivel en la sugestiva «Neon Blue» y especialmente sorprende una sugestiva bajada de revoluciones en la parte central del disco, sobre todo el perezoso ritmo impuesto por «Nothing but Trouble» liderado por lánguida guitarra discípula del gran J.J. Cale.
MANUEL BORRERO