Encuentros

Pribiz: «Estamos condenados a soñar»

 

Lo que comenzó siendo un proyecto de dos hermanos en 2011, se les ha ido de las manos hasta ser escogidos en 2016 por Movistar Artsy para grabar disco y actuar en el Festial Cruïlla. Con una formación compuesta por Ander Pribizchuk (guitarra y voz), Alan Pribizchuck (bajo y voz), Judit Robles (teclado y voz), Cels Burgès (guitarra eléctrica) y Oriol Castells (batería y voz), el disco se llama Carousel (La Cúpula Music), y es un ejercicio de positivismo e ilusión, capaz de arrancarte una sonrisa en tus días grises. Han conseguido mucho pese a su juventud, pero tras charlar con Ander, podemos confirmar que, a base de talento, esfuerzo y dedicación, vienen dispuestos a conseguir mucho más.

El disco salió a finales de 2016 pero algunas de las canciones ya aparecieron en vuestro E.P. ¿Estáis preparando ya material para un futuro lanzamiento?

 ¡Si! Tenemos un baúl bastante interesante de canciones que he ido escribiendo desde que tenía 17 años más o menos. Optamos por repetir algunos temas del EP simplemente porque creíamos que se merecían un poco más de vida. Hay mucha gente que aún no conoce las canciones y queríamos que llegaran tan lejos como fuera posible. Pero, obviamente, para el próximo trabajo tendremos cosas que nadie ha escuchado aún y esperamos mostrar una buena evolución a todos los niveles.

Fuisteis escogidos por Movistar Artsy para grabar el disco, lo que también os llevó a tocar junto a artistas de renombre en el Festival Cruïlla. ¿Qué recordáis de aquella experiencia?

Todo fue muy rápido, la verdad. Pero es culpa mía, creo yo. Lo ideal hubiera sido vivirlo con calma y saboreando cada segundo. Pero, claro… eso sólo lo aprendes con el tiempo. Ese día íbamos a tope, muy preocupados con estar a la altura del festival ya que éramos los primeros en tocar. Sabíamos que no habría mucha gente, pero para nosotros era muy importante quedar bien, ja, ja… cuestión de ego, supongo. Pero los días posteriores al concierto también fueron muy bonitos. Creo que el Cruïlla es un festival muy fácil de disfrutar. Todo está muy bien montado y te lo ponen muy fácil para que te lo pases bien. Parecerá que les hago la pelota para que nos vuelvan a invitar (podría ser el caso), pero la verdad es que nos lo pasamos muy bien.

Pese a vuestro sonido sólido y trabajado, no se encuentran muchas bandas con vuestra juventud en movimiento. ¿Os consideráis afortunados en este mundo, a priori hostil?

Creo que más que no encontrarse bandas con nuestra juventud, es que no nos paramos a escuchar lo suficiente. Pero de eso pecamos todos, tenemos tanta música a nuestro alcance que es muy fácil saturarse y no querer escuchar cosas nuevas. Creo que hay mucho talento, pero claro… es difícil centrarse en algo en medio de tanto ruido. Y, obviamente nos sentimos más que afortunados. Hace un par de años, cuando perdí a 3 integrantes del grupo, me veía llorando en algún rincón de mi habitación una buena temporada (no afirmaré ni negaré haberlo hecho), pero ahora mismo tenemos un disco grabado, tenemos una discográfica que nos apoya, y la gente cada vez respeta más lo que hacemos, así que, sí, la suerte es una pieza fundamental. Sobre todo, creo que la suerte ha sido clave a la hora de no encontrarnos con demasiada “hostilidad” dentro de este mundo. Personajes desagradables están en todos los ámbitos, no sólo en la música, pero por suerte, de momento no nos hemos cruzado con demasiados, ja, ja…

Habéis tocado con nombres del calibre de George Ezra y Billie The Vision and The Dancers sin tener el disco en la calle. Ahora que lo tenéis y está funcionando, ¿con quién querríais tener la oportunidad de tocar?

Mumford and Sons sería un sueño, la verdad. Pero creo que lo mejor sería conocer a tantos grupos como podamos, observar y aprender de ellos, ya sea a nivel musical o personal. Si hablásemos sólo de tocar, supongo que Mumford and Sons, Jason Mraz, Jack Johnson, Ben Harper, Kodaline, The Kooks, Coldplay, U2, son gente con la que “encajaríamos” por estilos, supongo, y que han dejado huella en mi mente y son secuencia en mi música. Pero si hablásemos de compartir escenario y además conocerlos, creo que la lista sería interminable. Tendríamos que pasar por todos los grupos que han nutrido mi cabeza con letras e ideas, desde el nu-metal, pasando por el hardcore, rock, pop, folk, y un largo etcétera…

Para vuestro sonido en inglés, entre el folk, pop, o indie, que recuerda a Of Monsters and Men o Ben Howard, la salida hacia el extranjero parece obvia. Pero, ¿qué circuito de salas encontráis sin salir del estado?

Pues creo que no tenemos una línea muy marcada de salas. Ahora mismo estamos tocando en todo tipo de situaciones, desde festivales a salas pequeñas, pasando por ciclos de teatros, markets, teloneando e incluso alguna fiesta mayor, siempre dentro de nuestro estilo obviamente. Creo que esto sucede por la variedad que damos, la gente disfruta mucho si viene a vernos en un teatro porque sólo tienen que sentarse a escuchar, pero también gustamos en otros formatos ya que tenemos de todo un poco: temas animados, temas lentos, mas íntimos y otros más experimentales. Así que encajamos bien lo que nos tiren.

Con semejante mezcla de estilos, ¿cuáles son vuestras principales referencias e influencias?

No hay un “algo” especifico, me nutro de todo lo que escucho y escucho muchos estilos. Si tuviera que descomponer mis temas tanto a nivel musical como de letras te puedes encontrar de todo. Desde Jason Mraz hasta Linkin Park pasando por Mumford and Sons, Two Door Cinema Club, Ed Sheeran, Glen Hansard, The Lumineers, creo que todo es inspiración, todo me puede llevar a coger la libreta y escribir tres o cuatro frases que después pueden acabar en un tema. Las películas y las series me inspiran bastante también a la hora de escribir y sobre todo las historias de la gente, soy un adicto a conocer las vidas y aventuras de la gente, todo lo que mantenga mi cerebro ocupado y todo lo que me haga sentir y pensar.

Ander, eres el principal compositor, y sin embargo el único sin una clara formación musical. ¿Cómo influye esto en la dinámica del grupo? ¿Cuál es vuestro método de trabajo?

De momento, la base siempre parte de mí. Normalmente, primero pasa por oídos de Alan, mi hermano, y luego a todo el grupo. Cuando llega a todos intento explicar lo que suena en mi cabeza, acompañado de onomatopeyas e imitación de instrumentos por mi parte y muchas risas, claro. Pero tienen mucha libertad a la hora de aportar ideas. Es verdad que para este disco las canciones ya estaban bastante hechas, los cambios más importantes han sido en las armonías vocales, aquí si se han añadido ideas nuevas tanto por parte de Judit como de Uri. Por último, Cels se atrevió con el banjo y quedamos muy contentos de cómo suena en el disco. La misión es fácil, tenemos que hacer lo que la canción nos pide. Ella manda y habla a través de nosotros. En general todos funcionamos en frecuencias parecidas así que todo fluye muy fácil, si alguien aporta una idea que mejora la canción, se queda, y si no, pues a buscar más.

Con el disco en la calle, ¿cómo ha cambiado el público en vuestros conciertos?

El disco nos está llevando a sitios donde obviamente no nos conocen de nada, así que de momento hay una cosa que no cambia, y es esa cara de sorpresa de la gente cuando nos escucha por primera vez. Eso nos encanta. Tenemos mucho cariño a las caras conocidas, ésas que nos siguen a muchos conciertos sin importarles dónde, y que ya se conocen todas las canciones, pero nos encantan las caras nuevas, no lo podemos negar. Cuando vayamos por el segundo disco vuelve a preguntarme lo mismo a ver si te puedo dar una respuesta más objetiva, ja, ja…

En las letras, se hacen muchas menciones a los sueños haciéndose realidad. ¿Consideráis que estáis haciendo realidad el vuestro? ¿Qué le diríais a la gente que todavía sigue detrás de los suyos?

Creo que ahora mismo estamos en ese “first step”. De alguna manera, todo pasó como tenía que pasar y tenemos la increíble suerte de haber podido grabar el disco y que nuestro nombre haya aparecido junto al de otros grandes de la música. Así que, sin duda es parte del sueño. Creo que lo importante es disfrutar de cada paso, tal como van ocurriendo las cosas, y continuar trabajando duro para mejorar el producto que tenemos.

Dar un mensaje a nuevos grupos hoy en día es muy difícil, no quiero ir de “conozco a gente” pero un día envié un mensaje al señor David Carabén para agradecerle que nos hubiera mencionado en una entrevista y me contestó con un breve “Foteu-li fort i tingueu paciència”, y creo que la clave es eso de la paciencia. Te puedes volver loco intentando conseguirlo todo tan rápido como puedas porque no paras de ver a gente con tu edad o incluso más joven comiéndose el mundo en giras mundiales. Supongo que para el resto de mortales lo mejor es disfrutar de los frutos de tu trabajo gradualmente.
¡Y no pares! Por nada del mundo, si de verdad es lo que quieres hacer, si no te ves en un futuro haciendo otra cosa que no sea tocar para emocionar a la gente y crear ese vínculo con alguien que respeta tu música…entonces no te rindas, duerme menos, sal menos, haz lo que tengas que hacer porque al final la vida no es tan cabrona como para no dejarte probar ni que sea un poco de lo que buscas. Creo que eso que acabo de decir es un poco de auto-terapia también, ja, ja, como para no olvidarlo… Hard work and patience.

Una vez se ha hecho realidad ese sueño, ¿qué os queda?

Creo que la maldición de la gente que se dedica a algo artístico es que tu sueño por alcanzar siempre va evolucionando. Primero sueñas con el disco, luego con festivales, luego con giras mundiales, luego con volver a tener esa conexión personal y cercana con la gente que te escucha, luego crear LA OBRA DE ARTE, luego que tu nombre signifique algo para alguien, ayudar a tanta gente como puedas y de tantas maneras como te sea posible. Estamos condenados a soñar siempre, tanto despiertos como durmiendo, pero disfrutamos de ello.

Pribiz es un proyecto que nace de dos hermanos, plagado de optimismo e ilusión, que se expande a más gente y que contagia al público con armonías y melodías pegadizas. Mirando hacia adelante, ¿cuál es vuestro camino a seguir?

Espero que podamos seguir creando material del que la gente escucha y luego viene y te dice… ¡Tío! Piel de gallina. Continuar tocando en sitios donde aún no saben qué es Pribiz, y claro… repetir donde ya nos conocen y nos tratan tan bien. Conocer a más profesionales, aprender de ellos y con un poco de suerte ganarnos un poco de respeto. No parar, ya que si nos tenemos que llevar ostias en la vida que sea haciendo lo que nos gusta.

Texto: Borja Figuerola

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