Siempre es un placer volver a tener noticias del de San Antonio. Flaco Jiménez nunca defrauda, y esta vez no va a ser una excepción. Claro, lo tenía fácil. Porque un concierto del Flaco es una auténtica fiesta, como su título indica, cargado de grandes éxitos, a los que pocos peros pueden ponerse. Veintiún temas grabados el año 2001 (queda lejos ya) en el Festival Breminale de Bremen con un músico mostrando la grandeza de todo su repertorio en el que, a partir del tex-mex se encuentran el country, el rock o la música latina. Ya sea con canciones extraídas de su carrera en solitario o con temas de algunas de sus aventuras grupales o colaboraciones, como los Texas Tornados y ese «Hey Baby que Pasó». Y no, no es un concierto actual. Pero eso no debe ser un problema para disfrutar, una vez más, de esas canciones y para rendirle al Flaco el homenaje que se merece escuchándolas de nuevo.
Eduardo Izquierdo