Este lanzamiento intenta saldar una deuda histórica. Que no hubiera un directo oficial de los mejores años de Bad Company era algo impensable. Y más cuando su periodo de mayor gloria coincide con la época dorada de los discos en vivo. Además de un agravio comparativo hacia una banda que consiguió adjuntar hard rock de altísima calidad con un potencial comercial tremendo.
Nacidos de las cenizas de Free las malas compañías reinaron en listas colocando uno tras otro sencillos de éxito y álbumes muy completos. Este doble compacto de estupenda presentación, el libreto interior y las fotos son de lujo, recoge dos conciertos. Uno en el Summit de Houston en mayo del 77 y otro en el Empire Pool londinense en marzo del 79. Ambas son dos actuaciones impecables (escuchar como canta Paul Rodgers en temas como «Like Water» o «Man Needs Woman» todavía emociona) que incluyen una buena representación de los temas clave de su repertorio, caso de «Shooting Star», «Movin’ On», «God Lovin’ Gone Bad», «Feel Like Makin’ Love», «Bad Company», «Rock & Roll Fantasy» o «Can’t Get Enough».
Lástima de que el sonido no acompañe del todo. Sobre todo en la grabación del recital de Houston ya que en el de Londres mejora algo. No es que sea malo, directo de mesa, pero podríamos equipararlo al de un buen disco pirata, le falta la pegada y la brillantez que una buena remasterización debería haberle otorgado. Todo y así es de presencia indispensable en las estanterías de los devotos del rock clásico. Y es que Bad Company eran un cañón en su momento.
Manel Celeiro
Foto portada: Jim Summaria