La banda de Sabadell tocaba por fin en su ciudad desde su retorno a los escenarios hace ya un año y medio. Esta vez, en un Festival, ellos cerraban la noche del viernes. El Xocolata a parte de un legendario programa de Radio es una especie de escaparate de las bandas de la ciudad de ayer como Tancat x defunció, Xavi Vidal/La gran aventura o los propios BB y de hoy, Salvaje Montoya, Amigdala y otros. Llegué a tiempo de ver medio concierto de Perroenelcamino, el grupo de Xavier Rubio (el que fuera armonicista de Bars 1989-2000). Muy sólidos, con un sonido influenciado por el rock sureño que puede recordar por su puesta en escena a bandas más comerciales como M-Clan o incluso Sol Lagarto. Los BB sin Sed por su parte arrancaron fuertes con «Perder la Fe» a volumen brutal. El sonido mejoró a partir de «Pisa las Flores» y «Botella rota». Esta vez contaban con la ayuda de Mariá Roch, el que fuera bajista de Los Sencillos y ahora con La Troba Kung-Fu, ya que Jaume, el bajista original, no pudó esta vez participar en el «bolo». Un concierto en que faltó público, en un fin de semana más bien malo para conciertos, coincidiendo con las típicas «cenas de empresa» navideñas. Se notó el ambiente un tanto desangelado y eso que jugaban en casa. Nada que ver con los locos conciertos protagonizados por el quinteto y un público entregadísimo en la barcelonesa Rocksound y Apolo (2). Todo y eso, su cantante Xavi Vendrell no paró de increpar y animar a los allí presentes. Le cayó alguna birra (entera) a la camisa y la cosa estuvo más bien divertida, caótica, un poco punk y atropellada a veces, cantando a grito pelado con el micro por los suelos. Sonó la fantástica «Tesoro de Palabras», la coreada «Luz del sol» que vuelve loco a cualquiera, con un Feliu a la bateria espléndido y «Reme» pegando unos guitarrazos supersónicos. «Todo hombre será rey» dio paso a la funky «Pies de barro» y la clásica ya en su repertorio «Una lagrima cayó en la arena» del maestro Peret, así hasta un total de 13 temas, poquitos al tratarse de un Festival con todo muy cronometrado. Ya en los bises sonó una muy emotiva «Piedra de águilas» que el cantante dedicó a su padres. Decir que el padre de Xavi falleció justo la noche anterior. La banda decidió tirar para adelante el concierto a pesar de todo. «Dame un adios» de una de sus primeras maquetas dió punto final a su quinto bolo del 2015. Parece ser que los BB sin Sed tienen cuerda para rato. De momento no hay canciones nuevas (están en proceso) pero fabricaron unas estupendas camisetas para la ocasión que vendían al finalizar. Eso tratándose de los BB ya es mucho. Palabra. Continuará.
Texto y fotos: Joan Soriano
