Cualquier referencia al movimiento Outlaw Country te sitúa a finales de los sesenta, en los setenta (sobre todo) y también algo en los ochenta. Parece que ahí se acabó todo aunque musicalmente e incluso en cuanto actitud, una nueva hornada encabezada por el ínclito Hank III y en las que muchos situaríamos también a Bob Wayne, Scott H.Biram, Whithey Morgan o los patrios Th’Booty Hunters o Dead Bronco podrían ser considerados dignos herederos.
Este fin de semana los “fuera de la ley” vuelven estar en boca de todos con el fallecimiento de Randy Howard. Cierto es que él jugaba en otra liga, y aunque llegó a tocar con Waylon Jennings o Willie Nelson, la suya era una evidente segunda división. Eso sí, su muerte le pone a la cabeza del movimiento por su evidente contenido cinematográfico.
Hace unos meses Howard había sido condenado a prisión por varios delitos: posesión de drogas, posesión de un arma en estado de intoxicación etílica y conducción temeraria con su licencia revocada. Casi nada. Ni corto ni perezoso el músico, que tuvo se gran éxito en el disco All-American Redneck de 1983 (con un discreto puesto 31 en las listas) decidió darse a la fuga cosa que le hizo objetivo claro de los cazarecompensas que todavía existen en los States.
El pasado 11 de junio uno de ellos lo encontraba en Lynchburg, Tennessee y Howard le respondía emprendiéndola a tiros que fueron contestados por el cazarecompensas, acabando con la vida del músico. Un final digno de lo que era: un verdadero outlaw.
Eduardo Izquierdo
https://www.youtube.com/watch?v=AmTzJLrKil8