En el actual número del Ruta ya habéis comprobado como nos han dejado fascinados Los Tupper con su mejor disco hasta la fecha. “Yesterday’s Pizza” (Sunthunder Records) tenía que haber estado en el pódium de los tres mejores discos del año, pero su aparición casi a final de año se lo ha impedido. Creo, por cierto, que se ha ganado el derecho a entrar en las votaciones de lo mejor de 2015. También lo hubiera colocado altísimo entre las mejores actuaciones porque han alcanzado un estupendo estado de forma y madurez. Además se han visto reforzados con la excelente labor a los teclados de Pepe Terán.
Antes de su actuación, con muchos ruteros, músicos y viejos rockeros presentes, abrieron The Bragasonics con un ameno set de versiones en el que demostraron buenos y eclécticos gustos con temas de Patti Smith, The Clash, Real Kids, Los Enemigos, Screaming Trees, New Bomb Turks o Flamin’ Groovies. Además un excelente final con el “Boston” de The Dream Syndicate en el que su guitarra solista demostró una vez más sus movimientos al estilo Neil Young a la hora de tocar. ¡Qué se pongan a hacer canciones propias ya!
Salieron enchufados Los Tupper desde el principio. Con ganas de pasárselo bien y que el público hiciera otro tanto. Así tras “Runaway man” dieron un buen repaso a esa cara A más rock’n’roll de “Yesterday’s Pizza”. “Turn me on” se acercó en directo más al r’n’r fácil pero con gancho de los NRBQ. Nos contaron que “14 Days” era sobre las relaciones esporádicas, pero su melodía nos sonó eterna. Luego nos dieron más boogie del bueno con el tema que abre el nuevo disco, “Susie in the nighttime”. Ahí saltaron ya a su cara B más psicodélica y los teclados de Pepe Terán cogieron más protagonismo que la siempre estupenda guitarra de Manu Gastado, nuestro Ronnie Wood particular en todos los sentidos. Ahí, en la movida primera fila, me contó un veterano seguidor que Manu tenía imagen de puro y clásico r’n’r como los grandes internacionales. Así apabullaron con la psicodélica “Time & Fortune” con el espíritu de Love y Dave Kusworth revoloteando por la sala.
Se atrevieron con arriesgados temas nuevos con toques que iban desde el blues hasta el glam rock y Raúl Real, cantante principal, fue creciéndose y soltándose. Recuperaron alguna perla del “Sardinista” como ese “In the name of God” con las voces de Manu y Raúl que sonó insinuante y a la que sólo le faltó el saxo de la versión grabada. Hacia el final regresaron a su flamante “Pizza”, con caja serigrafiada en la versión en vinilo, para machacarnos a tope con su “Hard-on (Blues)” en la que intimidaron como los mejores Beasts Of Bourbon. Volvieron a la fiesta de la cara A para despedirse con la contagiosa “Walkin’ the road” que sonó todavía mucho más a Dr. Feelgood sobre el escenario. Los bises eran obligados y nos soltaron uno doble nada complaciente, pero alucinante, en el que me quedé extasiado con una genial versión de los Love de Arthur Lee.
El trabajar en los últimos años con artistas internacionales consagrados de su ámbito (y de su sello, Sunthunder Records) como el Jacobites Dave Kusworth y Darrel Bath (Nikki Sudden, Ian Hunter, Dogs D’Amour); les ha dado el toque redondo e internacional que les faltaba culminar. Eso sí, junto a muchas horas de local y actuaciones tan magnéticas como la que dieron el pasado y alcohólico sábado en el Kafe Antzokia.
Texto: Txema Mañeru
Foto: Pepe Magallean