Hoy arranca la gira de Luke Winslow King, una cita muy esperada para los que confeccionamos esta web y revista. Reproducimos la reseña de su último disco aparecida en la versión de papel de Ruta 66.
Las fechas son:
Martes 20, Rocksound (Barcelona)
Miércoles 21, Loco Club (Valencia)
Jueves 22, Siroco, Madrid
Viernes 23, Kafe Antzoki, Bilbao
«Everlasting Arms»
Acertaba el artista en todas los caminos avistados en su anterior entrega, The Coming Tide. Sin un rumbo fijo, cualquiera de los tramos tomados daban lugar al corazón de la mejor música americana procedente del sur, ya fuese swing, blues, dixie jazz o folk. En poco más de un año vuelve con el siguiente trabajo, que no descubrirá nada a los que ya conocen el guiso, pero como la comida casera, sabe igual de bien que el primer día. Se echa en falta, quizás, un poco más de protagonismo por parte de Esther Rose (ahora su esposa), que queda relegada a mera acompañante en ciertas armonías vocales. Se pierde esa hermosa simbiosis, aunque en los temas de blues pantanoso se gana crudeza («The Crystal Water Springs» y «Domino Sugar»), y de todos modos, Luke tiene el suficiente carisma vocal para tirar adelante en solitario con soltura y frescura. Le colocan como líder de los nuevos tradicionalistas, y canciones como «Home Blues» o «I’m Your Leeve Man» así lo certifican. Pero, ¿saben qué? La música es música, no conoce barreras ni edades. Y Everlasting Arms es tan válido ahora como lo hubiese sido en el pasado o el futuro. Un doble cartel Jimbo Mathus/Luke Winslow-King sería todo lo que el melómano necesitaría para inundar el espíritu de felicidad y complacencia.
Texto: Sergio Martos
Video oficial: