BEAT AND GARAGE NUGGETS FROM SPAIN VOL.1
VVAA
Munster Records
Con motivo de la publicación en esta Ruta de un artículo centrado en el creciente interés de coleccionistas y aficionados en general por las canciones de garage y beat de la década de los sesenta grabadas en España y Sudamérica y olvidadas con el paso del tiempo, los responsables de esta (esperada) serie mostraban su disconformidad para con recientes referencias similares. Podía interpretarse como simple ataque de cuernos al ver que alguien, profano en la materia, se te adelanta por cuestión de meses. Algo Salvaje les da la razón: huyendo del cajón de sastre, de la recopilación al uso, el primer volumen marca la línea a seguir, dotado de sólida coherencia interna y soberbio gusto selectivo. Apoyadas en los siempre certeros textos del estudioso Vicente Fabuel, las veintiocho piezas que ocupan este estreno satisfarán al cien por cien al comprador: ofrece material extremadamente raro (los Tomcats y su voluntarioso spanglish llevándose al garage la copla <<A tu Vera>> que popularizó Lola Flores, Los Daikiris cantando un préstamo beat en euskera en pleno 1968, Los Botines liderados por el futuro Camilo Sesto firmando la tremenda <<Eres un Vago>> o Los Polares y su <<La Droga>>), curioso (el <<Corazón Lleno de Mal>> de Mike & The Runaways, pura ambrosía pre- Bravos, el <<Jabón de Azufre>> de Micky y los Tonys o el <<Ya no me Importas>> de Los Buitres) o sencillamente imprescindible (los ibásicos Lone Star con <<Mientes>>, Sirex con uno de sus mejores logros, ese nervioso <<Acto de Fuerza>>, los incombustibles Cheyenes con <<Y Olvídame>> o esos hits en potencia titulados <<No me Dejas Vivir en Paz>> y <<Sin Corazón>>, de The Four Winds and Dito y Los Betas, respectivamente). Aunque recomendamos no perderse a Miguel Ríos y su ultra- raro <<Antimusical>>, alegato en pro del rock cantado en castellano a base de fundir en alucinado max-mix a Beatles, Rolling Stones y Brincos. Corran a por estos vitamínicos nuggets antes de que los guiris se zampen la primera edición…
Texto: ALFRED CRESPO