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Amantes del country-soul, este es vuestro disco soñado. Porque por un lado tenemos a Nikki Hill, encumbrada como la gran estrella del rock & roll y el blues-soul de tintes más retro. Por otro está Deke Dickerson, una auténtica leyenda del country y el rockabilly que no se cansa de facturar álbums siempre situados entre lo mejor de cada año. Y finalmente tenemos a The Bo-Keys, banda de Memphis formada en 1998 para acompañar al ex artista de Stax Mark Rice, paladines del neo-soul y que hace apenas un año nos sorprendían con una impresionante versión del «Stuck In The Middle With You» de Stealers Wheel. Pero ahora llegan las malas noticias. La unión sólo ha servido para facturar un EP de cuatro canciones que se hace corto, muy corto. El inicio con «Lovey Dovey» y esos vientos ya hacen prever algo grande. En «Feelins» optan por dar protagonismo a la combinación de voces de Dickerson y Hill para facturar una exquisita balada. Con «Struttin» llega el desmelene de Nikki, demostrando toda la fuerza de la que habitualmente dota a sus interpretaciones. Y «Lady Killa» vuelve a dar protagonismo a la voz de Deke y a los vientos de The Bo-Keys en una combinación prácticamente perfecta para cerrar un trabajo que merece continuidad inmediata.
Eduardo Izquierdo
