¿Qué hace un iraní dejándose influir por gente como los Kinks, los Doors y la psicodelia juntándolo todo con la música tradicional de su país? Lo que hace el anteriormente conocido como Kourosh que ahora añade el apellido a su propuesta. Este músico, que escapa por los pelos de los fundamentalistas islámicos, tiene en su haber el intentar llevar a la música iraní a nuevos senderos nunca antes recorridos en los que la influencia de la música occidental se nos antoja vital.
Por eso sorprende encontrarse con un proyecto que lejos de ser un pastiche de influencias nada definidas, peligro evidente de la propuesta, se convierte en una visión excelente de los pasos más importantes de la carrera de un músico empeñado en modernizar el rock de su país. Esta retrospectiva recoge sus mejores grabaciones entre 1973 y 1979, su período más creativo y, sin duda, más destacado. Él sigue viviendo en Teherán, sigue intentándolo y aunque nunca ha conseguido recuperar la calidad de sus grabaciones de los 70 (quizá por tirarse más de 20 años sin grabar) sigue siendo un músico más que interesante. Que no les asuste la etiqueta: rock psicodélico iraní…
Hank C.Jr