
Silverflame son un sexteto de Girona comandados por la portentosa vocalista Sheila Endekos, y que se podrían englobar sin problemas en esa etiqueta que lleva por nombre retro.

Se podría establecer una comparación mutua con los barceloneses The Mothercrow, y no sólo por tener cantante femenina al frente, si no por su querencia por la década de los setenta. Pero Silverflame en vez de basarse en el hard rock más ortodoxo o al proto metal, se dejan querer más por el rock clásico americano, el blues y el soul. Un poco como The Black Crowes, vaya. Escuchen la inicial «Some More Blues» (góspel rock a todo trapo) o el tema que da nombre genérico al trabajo, y se entenderá lo que planteo. El trabajo, con una producción nítida donde todo está medido y en su sitio, fluye como río caudaloso; en ocasiones más soul («Here For Nothing»), en otras más sureños («The Skin Of The Snake»), hardrockeros en la potente y con mucho gancho «Nighttime Lover», (con un robusto trabajo de guitarras), para finalizar el trabajo de manera blues y pantanosa con «Snake».
Pero si hay alguna canción que resuma todo lo bueno que atesora este sexteto es ese tour de force que lleva por nombre «Echoes Of The Void» donde el soul y el rock americano se encuentran y estallan como choque frontal de trenes (atención al trabajo con el órgano Hammond y la dupla de guitarras). Segundo y firme paso de este combo que está a la espera de ser descubiertos por ese público devoto del rock americano. Satisfacción garantizada.
Texto: Xavi Martínez






