
No hay nada como ir a un festival abierto a explorar bandas desconocidas y de repente llevarte un zasca: unos tipos que no conoces de nada te agarran por el pecho, te sacuden y ya no te sueltan. De pronto, el hardcore se convierte en otra cosa. Más abierto, más humano, con canciones que te empujan y abrazan al mismo tiempo.
Con riffs que te parten la cara y melodías que te la reconstruyen. Sudor y sonrisas de una banda que parece estar tocando el bolo de su vida, tanto da si en el escenario grande del Tsunami Xixón Festival o en el local más cutre de su barrio. Es la actitud, la entrega… lo que marca la diferencia. Y lo que dicta la sentencia: no exagero si digo que fue uno de los mejores directos de aquel festival, y allí no faltaban nombres grandes.
Lo mejor es que FUET! están todavía al inicio de su historia. Una que arrancó con unas latas de atún en un Resurrection Fest. Y aquí están, a punto de sacar su primer elepé, Make It Happen; un disco que promete ser tan explosivo como su directo. El mismo que los ha llevado a pasearse por los escenarios del Tsunami o el Mad Cool antes incluso de tener el disco en la calle. Quieren girar, sudar, crecer, conquistar públicos nuevos. Y no dudo que lo lograrán. Si aún no los conoces, es un buen momento para descubrirlos. Que esto no es hype vacío, sino el principio de algo que, como su propio nombre indica, te pegará un latigazo memorable.
Para quien no os conozca: ¿quiénes son FUET!?
FUET! Son 5 amigos que disfrutan de la música como niños pequeños. De escribirla y tocarla, pero también de escuchar y vivir la de otros artistas, claro.
Algunas de vuestras influencias parecen evidentes: Refused, Panic! At the disco… ¿Qué bandas o artistas han definido vuestro sonido?
Lo de Refused nos lo dicen al acabar cada bolo, pero no podemos decir que esté en el podio de nuestras influencias. Escuchamos de todo y nos movemos con un sonido entre el hardcore, punk y el indie, por lo que si hay que mencionar influencias innegables: Idles, Turnstile, Fontaines D.C., Touché Amore y At the Drive-In tienen que estar ahí, no necesariamente en ese orden.

En vivo dais la sensación de tener muchas tablas pese a vuestra juventud como banda. ¿De qué proyectos venís y cómo se formó el grupo?
Llevamos unos 15 años en distintas bandas, dando conciertos de manera más o menos constante según de qué miembro de FUET! se trate, pero lo tenemos muy dentro.
Rubén y Al tocaban en una banda llamada Domination cuando Gon estaba en Mind Control, y Héctor en The Citizen. Poco después Rubén y Bob se juntaron en Matuja, y más tarde ambos comenzarían un nuevo proyecto con Gon, Mezcalina Jones, mientras Héctor ya tocaba en Sic Transit Gloria. Actualmente algunos de nosotros también tocamos en otras bandas a la vez que en FUET!: Héctor en Skylines y Gon en La Milagrosa.
Del single «Glowing», decís que va de contrastes. ¿De qué tratan vuestras letras y cómo representa esta canción la esencia de la banda?
Intentamos que las letras siempre ondeen una bandera optimista. En su mayoría son canciones que nos gritamos a nosotros mismos como una especie de mantra para seguir yendo hacia delante de la forma más sana posible, como banda y como personas.
El hardcore siempre ha sido un género con mucha carga social y emocional. ¿Hay algún mensaje que queráis transmitir con vuestra música más allá de la energía y emoción?
Desde un principio nuestras letras han sido bastante desenfadadas y «ligeras», en ese aspecto; hemos cantado mucho a la amistad, al cuidado de seres queridos y, por supuesto, de uno mismo… A veces desde una perspectiva un tanto existencialista. Al contrario que muchos otros grupos, FUET! no surge de la necesidad de reivindicar grandes causas; pero cada vez tomamos más consciencia de la importancia y, por lo tanto, responsabilidad, que supone tener un altavoz.
Make it Happen es vuestro primer elepé. ¿Qué podéis contarnos del proceso de composición y grabación? ¿Hubo algún reto que surgiera durante la creación del álbum?
La composición de los temas es un proceso que comienza de un modo bastante individual y más tarde se pone en común con el resto de la banda. Ál y Gon son generalmente quienes traen las ideas que, con el trabajo de todos, se convierten en canciones de FUET!
Creo que el principal reto de esta grabación, dejando a un lado los retos normales que supone enfrentarte a inmortalizar un álbum, ha sido componer «THINK THINK THINK», que fue la última canción en cerrarse y cuya esencia queríamos que de algún modo ejerciera de “pegamento” entre el resto de canciones del disco. Hubo muchas versiones hasta que dimos con la tecla un día en el local.
Decís que tocar en vivo es una experiencia emotiva que os remueve por dentro. ¿Podéis desarrollarlo?
Salimos al escenario a dar lo que somos. Salimos a defender en directo una colección de canciones de las que estamos muy orgullosos. Salimos a sudar los temas, comprometidos con nuestro público, con nuestra música y con nosotros mismos.
Tocar nuestras canciones delante de un público que ha venido dispuesto a conectar con ellas es muy emocionante. Nos acerca, aunque a pequeños pasos, al sueño de quizá vivir de lo que amamos hacer. El desgaste físico de los conciertos también estimula de algún modo toda la parte emocional que supone para nosotros dar un concierto. Sobre el escenario somos vulnerables, estamos absolutamente expuestos y terminamos exhaustos. Nuestras vidas se paran durante un breve periodo de tiempo en el que solo somos FUET! y no existe nada más.
Vuestra música combina la intensidad cruda del hardcore con momentos de melodía y emoción. ¿Cómo encontráis este equilibrio entre agresividad y sensibilidad en las canciones? ¿Cómo las escribís?
En diciembre del año pasado tocamos con Néboas en un evento underground de Málaga, y Tomás, el bajista, nos dijo que cada uno de nuestros temas sonaba diferente al resto del setlist. No sabíamos si lo decía como algo bueno o menos bueno, pero aclaró que era algo muy bueno; que cada tema es muy reconocible. Le dedicamos el tiempo que necesita a cada canción para que acabe siendo la mejor composición posible (dentro de nuestras posibilidades). Nos sale de dentro. La primera imagen que le vino a la cabeza a Rubén, el cantante, al escuchar la demo de «LDG» fue encontrarte con un crush de la adolescencia en un pogo de Idles tras años sin veros, y el resto de la letra y melodía salió de lo que se sentiría en esa situación.
Como banda emergente hardcore, ¿qué os distingue de otros grupos?
Creemos que el hecho de no ser estrictamente una banda de hardcore es uno de nuestros sellos. Nuestra música es muy heterogénea. Aunque navegamos en aguas del hardcore, el hecho de que la gente pueda reconocerse en pinceladas de otros géneros que resultan más familiares, hace nuestra música más accesible a personas que nunca se imaginaron disfrutando del género y de pronto dicen “este no es mi rollo, pero tenéis algo que me encanta”. Los directos son la guinda. No diríamos que es algo diferenciador porque hay bandas con directos increíbles pero creemos que la experiencia en directo es un punto fuerte de nuestra banda.

Mirando al futuro, ¿cuáles son vuestras ambiciones para el próximo año?
Queremos salir a tocar fuera, mostrarle a la gente de otros países nuestra música y nuestro directo. Nos encantaría tener la oportunidad de salir a darle a Make it Happen la gira que se merece.
Para quien no os haya visto, ¿qué puede esperar de un concierto de FUET!?
Un concierto memorable, donde lo único que importa es la música, bailar y disfrutar del momento junto a amigos y desconocidos.
Para ir acabando, ¿qué planes hay de presentación del disco? ¿Se viene gira?
Estamos cerrando fechas para lo que queda de año y 2026, hasta la temporada de festivales, donde esperamos poder llegar a un público nuevo. Las reseñas de los festis que hemos tocado hasta ahora han sido muy buenas, queremos llegar al próximo con un show que no deje indiferente a nadie.
Por último, debo preguntároslo: ¿cómo surgió la idea de llamaros FUET!?
Lo propuso Ál como “algo que le gusta a todo el mundo” y por la gracia se quedó. La idea de grabar el primer EP ocurrió tras el Resurrection Fest de 2019, donde estuvimos alimentándonos a base de fuet y latas de atún, por lo que es un elemento que nos lleva a esos días con tus mejores amigos en un festival donde puede que toquemos algún día. También descubrimos justo antes del Mad Cool que significa “latigazo” en catalán, y eso nos flipa.
Texto: Borja Figuerola






