El esloveno Slavoj Žižek no es la primera vez que hace desfilar a sus habituales (Lacan, Hegel, Marx, Freud, Heidegger, etc.) en torno a la temática del sexo, como género y como acto, y el placer. El lector puede encontrar títulos como El sexo y el fracaso del absoluto como referencia anterior más directa, por ejemplo.
En El plus de goce, aborda el filósofo la renuncia por parte del ser humano a los placeres, llegando a una autorepresión que desemboca en un deseo de reprimir y cancelar el goce en otros. Argumentado desde la dominancia ejercida por el sistema capitalista sobre los ciudadanos, centra parte de la explicación en los métodos opresores y de castigo que llevan a las renuncias y a la obediencia, siendo estos mecanismos más sofisticados en los que la violencia no es exclusivamente física.
Para el desarrollo de su argumentario, Žižek acoge ideas de otros filósofos, le da vueltas y se detiene en las aportaciones de otros pensadores (como Saroj Giri, por ejemplo). Todo ello, para alcanzar la conclusión sobre la ganancia de la pérdida, a cambio de nuestra obediencia y a fuerza de trastocar las relaciones, aplica esta lógica a las relaciones de pareja, donde proporciona reflexiones interesantes. Lacan llamó este placer perverso plus de goce, que titula el volumen.
David Vázquez