Padua es una ciudad que vive a la sombra de sus vecinas, la mediática Venecia y la romántica Verona, pero lo cierto, es que es precisamente eso lo que la hace especial. Su concepto universitario y la herencia cultural seguro que ha influenciado a Messa, originarios de Cittadella, y que toman el nombre de la referencia a la Basílica de San Antonio de Padua, un importante lugar de culto cargado de enigmas oscuros.
El evolutivo de la banda, nos lleva a que si consultamos sus influencias éstas fluyan de una forma inabarcable entre conceptos que pivotan en el doom como denominador común, y que se pueden ver complementados con el jazz, drone, arabic, folk, blues, post-punk o esencias mediterráneas. Por otra parte, si ignoramos las más que evidentes referencias de genero metalizado, podemos entrever trazas de Cocteau Twins, Siouxsie and The Banshees, o bien más contemporáneas, en la versatilidad de la voz de Sara Bianchin al estilo Florence + The Machine o Tori Amos. Así mismo, si la banda muestra una imagen de negro riguroso, la vocalista complementa su outfit con camisetas muy bien escogidas, como puede ser la de la banda de dark wave Cold Cave.
Lo cierto es que los italianos parecen escapar de los encorsetamientos, y se sienten muy cómodos entre lo multidisciplinar, ya sea incluyendo pasajes de jazz lluvioso en medio de otros ásperos, o un blues de cruce de caminos entre un doble bombo. Para poder evidenciar todo eso, dispondremos de dos próximas fechas en nuestros clubs, son las siguientes:
-27 de junio de 2025. Gruta 77. Madrid + Nethervault.
-28 de junio de 2025- Sala Upload. Barcelona.
Texto: Oscar Fernández Sánchez