Los bilbaínos Amann & The Wayward Sons están de vuelta con “Too Good to Be True”, primer adelanto del que será su quinto álbum de estudio, previsto para principios de 2026, coincidiendo con el décimo aniversario de la banda.
Y lo hacen con un trallazo de blues rock tan crudo como certero, una canción que combina riff pantanoso, sudor gospel y aroma a escombro ideológico, porque aquí no se viene a hablar del amor ni del verano: se viene a hablar del fin de una promesa.
“Too Good to Be True” es un tema de sonido poderoso, con un arranque de guitarra que parece pedir whisky y redención a partes iguales, y que pronto se convierte en una elegía a esos Estados Unidos que se vendían como tierra de oportunidades… y que ha terminado siendo territorio de polarización, retroceso y trampa emocional. Como viene siendo habitual, la banda no se anda con rodeos ni ambigüedades: lo que antes era un sueño hoy huele a eslogan roto, y esa sensación la han trasladado de forma impecable al arte gráfico, obra del estudio Comunicom, que firma una portada con mensaje y mala leche. Como debe ser.
Este adelanto no detiene la locomotora de los Wayward Sons, que siguen sumando kilómetros y salas a su gira europea “Shake It Like Hell Tour 2025” en la que siguen llevando por todo el continente las canciones de su aclamado álbum anterior, When The Day Goes Slow. El tour incluye paradas tan variadas como Zaragoza, Santander, Granada o el Puerto de Santa María, antes de cruzar el charco del canal y desembarcar en julio en escenarios de Nottingham, Edimburgo, Glasgow, Londres y Sheffield. Más tarde, en otoño, volverán a casa para cerrar en Bilbao, Madrid, Benavente y Béjar.
Texto: J.F. León
