La banda madrileña Kaos Urbano se encuentra ultimando los preparativos para un año que promete ser emocionante. A los conciertos por toda la geografía nacional que dieron tras la edición de su último trabajo Punk Save Madriz (Potencial Hardcore, 2024), se une una agenda cargada de cosas: ampliar actuaciones por Latinoamérica, preparar la gira del año que viene celebrando el trigésimo aniversario del grupo, y la grabación en breve de unos singles nuevos y de un disco de recopilación con temas históricos de su repertorio de siempre “que quizás no se grabaron en las mejores condiciones en su momento” reinterpretados en el sonido actual del grupo.
Quienes nos cuentan todo ello son Sku (su cantante) y Peke (el batería) en las proximidades de la sala situada en el Barrio del Pilar donde ultiman los preparativos para todos estos movimientos. “Ya tenemos grabados tres canciones”, dice Sku. Peke reconoce que en principio ése es el plan de la banda, pero “es lo que tiene hacer todo sin dejar de tocar y de ser bastante impulsivos a la hora de hacer las cosas y elegir los formatos”. Se refiere, por ejemplo, a todas las vueltas que dieron antes de decantarse por el un larga duración para el que es hasta la fecha, su último trabajo. “Somos muy caóticos, nunca mejor dicho. Hemos llegado a hacer conciertos en la gira de presentación de un disco en el que no tocamos ninguna de las canciones del mismo”.
Lo que sí aseguran es que el cambio de estudio no responde a posibles descontentos con el resultado de las grabaciones anteriores: “Ya que Manolo Arévalo (Boikot), técnico con el que trabajamos habitualmente nos tiene pillado tan bien el punto quisimos que nos grabara él esta vez” cuenta Sku; “Y que nos gusta ir probando cosas” añade Peke, refiriéndose al caso de Angélica Uceda, “a la que conocimos a través de una colaboración con 13 Bats” y que terminó encargándose del sonido en varias grabaciones y que incluso llegó a cantar con ellos en el disco Euforia (Potencial Hardcore, 2022).
Kaos Urbano es por otro lado, grupo amigo de establecer lazos fácilmente con otros artistas. Hay hermandad con bandas afines como Non Servium, Suzio 13 o Núcleo Terco, de filosofías muy similares a la suya y con las que podría decirse perfectamente forma una escena surgida en la periferia de Madrid. “Sí claro”, concede Sku, “todos esos grupos venimos de la misma historia: antifascismo y lucha obrera”. Peke por su parte reflexiona: “Está claro que hay muchos grupos que hemos venido desde distintos lugares llevando una historia paralela a partir del mismo sitio: tratar de cambiar a nuestra manera nuestros barrios y hacer ese trabajo de lucha social”.
Pero igualmente hay que indicar tanto las que han tenido con veteranos del punk como Evaristo Páramos o Fermín Muguruza (quien por ejemplo no dudó en nombrarles desde el escenario por su reciente paso por la capital) como en coordenadas insospechadas, como las que transita Waor, rapero de Aluche con el compusieron “Suburbiales” “La verdad es que todas ellas surgieron de la manera más natural. Con Fermín contactamos gracias a Podri de Ratzinger, que le conocía”, recuerda Sku. “Fue un gustazo grabar allí en los Rock Studios de Bilbao con Muguruza”, añade el batería. Pero igualmente han sido capaces de construir alianzas insospechadas, como con Waor, rapero de Aluche. Nos explican cómo surgió todo: “En una campaña de promoción de Natos y Waor, él repitió en varias ocasiones que de pequeño siempre quiso ser el cantante de Kaos Urbano. Nosotros lo compartimos en redes y alguien comentó que de ahí podía nacer una colaboración. Y así fue”. Hijos de la Ruina e Hijos de la Calle de la mano cantando el tema «Suburbiales».
“Hemos apostado últimamente por la positividad” responde Sku cuando le pregunto por la posible evolución del sonido de Kaos Urbano en toda esta ya larga trayectoria. “Dentro de mantenernos con el mismo mensaje, lo cierto es que la gente no quiere que le des la chapa política. Van a los conciertos a pasarlo bien porque la vida ya es lo suficientemente dura como para cabrearte aún más” completa el cantante. Peke añade: “No tiene sentido estar haciendo el Bronka y Rebelión toda la vida”. Kaos Urbano no tienen problema en exponer sus sentimientos en momentos intimistas en los que recordar al padre fallecido, pedir perdón a la madre por todos los disgustos o mencionar a los amigos. “Sí claro que sí, se tratan de canciones intergeneracionales, contados en primera persona” dice Sku. “Además si indagas detenidamente te das cuenta de todo el contenido político que tiene una canción como “Perdóname madre”, toda la juventud que vivimos, de lucha social, de juicios, de peleas…”.
La banda madrileña disfruta de un merecido reconocimiento a gran escala, algo que evidentemente responde a un trabajo continuado a lo largo de todos estos años, pero sobre todo a la toma de conciencia por parte de la banda de querer hacer algo grande. “Hace como unos 7 u 8 años nos planteamos el dejar morir el proyecto o tirar adelante en serio”, recuerda Sku. “A partir de 2011 vimos que había que echarle horas a muerte y profesionalizarnos. Tal y como contamos en el libro Los Hijos de la Calle. La Historia de Kaos Urbano (2021), vivimos una época por el 2007 en el que nos llamaban incluso para grandes festivales pero nosotros no estábamos preparados para ello ni mental ni físicamente.
Decidimos por tanto que por nuestra parte no fuera y lo dimos todo.” No dudan en reconocer qué ha caracterizado a la trayectoria del grupo: “Creemos que la carrera de Kaos Urbano es muy progresiva, empezando muy abajo y las pequeñas subidas que íbamos teniendo sucedían muy poco a poco, construido todo además desde la honestidad y el trabajo. No hay imposturas”, concluye Peke. Sku zanja la cuestión de forma tajante: “Ese crecimiento lento nos ha venido muy bien, porque ha habido quien lo ha hecho mucho más rápido, no han vivido todas estas fases y se han vuelto gilipollas con el éxito”.
Precisamente respecto a todo este trabajo que mencionan y habida cuenta de los episodios por los que por ejemplo ha pasado Sku que hicieron incluso temer por su vida, les preguntamos si en el diseño de giras y de actividad frenética dejan huecos con los que imponerse descanso. “El caso es que cuando peor lo paso es cuando estamos parados” dice sonriendo Sku. “Realmente lo que intentamos es diseñar todo de manera que no se queme el grupo, teniendo en cuenta toda la tensión que se vive, todo el tiempo que pasamos en la carretera, pero la verdad es que estamos viviendo ahora un momento tan bueno en el grupo que queremos aprovecharlo todo lo que podamos”.
Para el final de la entrevista guardábamos el último tema de conversación, aquel que tiene que ver con el compromiso político de Kaos Urbano en su música. Responden negando categóricamente cuando le formulamos la posibilidad de entender el punk sin formular crítica política alguna. “Es innato. No concibo hacer una canción sin cagarme en alguien” dice Sku. Peke detalla el porqué de su negativa: “Al menos en nuestro caso, la reivindicación, la lucha social y la búsqueda de la justicia va de forma intrínseca con la música”. ¿Os sigue pareciendo que la situación en los barrios de fuera de Madrid es la misma que la que os llevó a formar un grupo de punk? Se me ocurre decirles. “Yo veo desigualdad social” me dice Peke. “Es un sálvese quien pueda” sostiene Sku, que aun así matiza: “Hay cosas que son peores que antes y otras que no”. Con la mente puesta en la alcaldía de la ciudad y en la presidencia de la comunidad de Madrid, el batería incide: “Es verdad que sí que puede existir lucha vecinal en los barrios y que no podemos quedarnos con la radiografía que nos quieren vender de que Madrid es Almeida y Ayuso.
No son ellos, también sigue quedando el Madrid reivindicativo y social que se sigue dejando la piel en la calle por intentar que esto no siga siendo así. Se sigue luchando mucho pero sí que es verdad que se tiende a la desmovilización social”. Sku cierra con algo de optimismo: “Hay chavales que siguen empujando. A lo mejor no como lo hacíamos nosotros, pero con sus movidas, sus fiestas… Es el relevo. Yo con gusto daré el testigo a la siguiente hornada que vendrá además arrasándonos”. Un relevo que además siempre tendrá en Kaos Urbano un referente: “El altavoz musical como herramienta de lucha no se va a morir nunca porque al final hay muchísima gente que empieza en los movimientos sociales o que empieza a luchar gracias a una letra de una canción que le llega al alma”.
Y con ese rayo de esperanza nos despedimos, satisfechos de haber podido compartir con Sku y Peke este momento preciso previo a un año intenso para Kaos Urbano.
Texto: Tomás González Lezana