¡Al fin! ¡Las plegarias de sus muchos seguidores han sido escuchadas! Tras un largo periodo de hibernación, Carrots regresan a los escenarios. De momento solo anuncian tres fechas, pero esperamos sean un aperitivo de nuevas noticias relacionadas con una banda que transmitió la sensación de haberse separado con muchas cosas que cantar y contar que quedaron en el tintero. No sueltan prenda, pero aquí están los cuatro poniéndonos al día…
De vez en cuando se rumorea el regreso a la actividad de Carrots… y ahora se anuncian dos conciertos de la banda, en Zaragoza y El Prat. ¿Porqué ahora sí y en estos dos lugares?
Willy: Javier Benito nos preguntó si habría alguna posibilidad de reunir al grupo con motivo del 25º aniversario de La Lata de Bombillas, y naturalmente le dijimos que contara con nosotros. La Lata es nuestra segunda casa; de hecho, fuimos de los primeros conciertos que se hicieron allí y después volvimos muchísimas veces. Este local es sinónimo de amistad, felicidad y buenos recuerdos. Si La Lata es nuestro hogar, podríamos decir que La Capsa es nuestra madre. Este centro cultural cumple 30 años, y no podíamos faltar a su celebración. Allí empezamos a ensayar nada más inaugurarse y, dos años después, nació Carrots. En La Capsa grabamos nuestra primera maqueta, presentamos nuestro primer disco y compartimos escenario con El Niño Gusano, La Costa Brava, Kevin Ayers y Australian Blonde. Hemos vivido tantas cosas bonitas en este edificio que su aniversario es también el nuestro. Dos salas que fueron fundamentales en nuestra carrera y que también han jugado un papel clave en el desarrollo de la música independiente.
¿Qué formación va a actuar en estos conciertos?
Robert: La formación será la misma con la que grabamos Sunshine y All It Takes is a Little Confidence, Vicente Maciá “Willy”a la guitarra y voz principal, Robert Castellanos al bajo y los coros, Freddy Forner se encargará de los teclados y coros, y Matías Segovia a la batería. Es la formación que más tiempo hemos estado juntos, tanto grabando como tocando en directo.
Todos los miembros habéis continuado involucrados en la música, en diversos proyectos… ¿podéis resumirlos?
Willy: Después de la disolución del grupo en 2005, cada uno de nosotros ha seguido involucrado en distintos proyectos musicales. Freddy formó Silas Lang junto a Alberto y Edu de Gallygows, y más tarde se unió a Moves, la banda que Matías Segovia creó tras la separación de Ovni, el grupo que lo trajo a España. Durante este tiempo, también colaboró con Love of Lesbian y Ovni. Por su parte, Robert tocó durante varios años en Suite y, en 2008, se incorporó a la banda de Enrique Bunbury, con quien ha grabado varios discos de estudio y en directo, además de girar continuamente por América y España. Yo inicié mi proyecto en solitario, Pigmy, con el que hasta la fecha he lanzado tres discos y un EP. En 2019 me uní como guitarrista solista a Moves, en sustitución de Piti Elvira, lo que llevó a que tres miembros de Carrots coincidiéramos en un mismo proyecto en estos últimos años. Sin duda, eso ha facilitado mucho este regreso.
Vuestros tres álbumes siguen siendo referentes del mejor pop realizado jamás en este país. Todo encajaba en ellos, desde la candidez de Saving Chocolate Coins (99) hasta la perfección de All It Take Is a Little Confidence! (04), pasando por el disco que casi logró un éxito masivo más que merecido, el incombustible Sunshine (01)… Con la perspectiva del tiempo transcurrido, ¿cómo valoráis vuestro legado discográfico? Conociendo vuestro obsesivo afán perfeccionista, ¿qué añadiríais o eliminaríais de ellos?
Willy: Creo que grabamos tres buenos discos, cada uno con su propia personalidad. El primero exploraba una psicodelia más ácida, experimental y espontánea; éramos como pequeños duendecillos hiperactivos en un laboratorio musical. Con el segundo, refinamos nuestro sonido con melodías más directas y arreglos de pop sofisticado, sin abandonar la psicodelia. En el tercero, alcanzamos una mayor madurez y eclecticismo, con una producción aún más elaborada. Siempre buscamos evolucionar sin perder nuestra esencia.
Freddy: No cambiaría nada. Cada trabajo refleja tanto nuestro estado de ánimo como nuestra madurez musical. Se puede ver la evolución musical y transformación de lo que sentíamos en cada etapa. Y al escucharlos vuelvo a sentir y viajar a los momentos vividos.
Robert: En mi opinión, grabamos el mejor disco que podíamos hacer y que más nos representaba como músicos y personas en cada momento, siempre hay canciones, arreglos o letras que con el paso del tiempo crees que podían haber sido diferentes, pero siempre fuimos fieles a nuestra manera de entender cómo debía ser nuestra música.
Mati: Creo que dejamos un bonito legado en muchas personas, se nos sigue considerando un grupo de culto en algunos ambientes, y es algo de lo que nos sentimos orgullosos.
Me consta que habéis tenido poderosas presiones para que regreséis al estudio de grabación, pero 20 años sin nuevo material es mucho tiempo. ¿Opciones de que vuestra discografía aumente?
Mati: De momento nos hemos juntado para estos conciertos, pero los ensayos están yendo muy bien, nos gusta pasar tiempo juntos y no descartamos volver a entrar en el estudio.
Willy: La verdad es que la música sigue fluyendo entre nosotros de manera muy natural, veamos cómo terminamos con estos conciertos, pero sí que es verdad que tengo curiosidad por saber cómo sería un nuevo disco de Carrots veinte años después de nuestra última grabación.
¿Y de que estos conciertos en sala sean un aperitivo para próximos shows?
De momento, además de los dos conciertos de aniversario en La Lata y La Capsa los días 15 y 29 de marzo, también podemos anunciar que tocaremos el 5 de abril en el Psych Fest de este año, en la sala Paral·lel 62. Estamos abiertos a que salgan más cosas, pero de momento estas son las tres únicas fechas que tenemos.
El panorama musical ha cambiado profundamente desde vuestra disolución, pero siempre quedará un hueco para propuestas como la vuestra. ¿Formaciones o solistas actuales con los que os sintáis identificados?
Mati y Robert: Hay muchísimos artistas haciendo cosas increíbles. Hace tiempo que seguimos la pista a los jóvenes Lemon Twigs, y la verdad es que nos encantan. Su directo es una pasada, y tienen canciones preciosas, con ese eclecticismo que tanto nos gusta a los Carrots.
Willy: A mí, personalmente, me encantan Minibús Intergalàctic. Les produje su primer disco, Meditacions des dels Miratges Mercúrics (2024), y es una excelente mezcla de psicodelia, garage y pinceladas de folk lisérgico. Además, los quiero un montón, son como personajes de dibujos animados. También coincido con mis compañeros en que The Lemon Twigs son unos virtuosos tanto a nivel compositivo como técnico, espectaculares.
Freddy: Si aceptamos a Steven Wilson como actual es una de mis debilidades.
Por último, hace algo más de veinte años os entrevistamos en esta Ruta y las respuestas no tenían desperdicio, con más chulería que los famosos hermanos Gallagher. ¿Estáis más comedidos?
Robert: No recuerdo absolutamente nada de esa entrevista que mencionas, igual que tampoco recuerdo muchas cosas de aquellos locos años del Boggie, tan intensamente vividos, ahora hablando entre nosotros y recordando aquellos días sí que es posible que fuéramos algo arrogantes en algún momento, pero creo que forma parte de la propia esencia de la juventud y del rock’n’roll.
Willy: No me lo recuerdes, mejor hacer como que no pasó… Un poco bocazas éramos, no lo voy a negar. Y siendo honestos, creo que la mayoría de las veces era cosa mía. Pero bueno, es peor la falsa modestia, ¿no? (Risas)
Mati: Bueno ¡ahora dejando la coña estamos más grandes, con más historias en nuestras espaldas y al final eso te hace madurar como persona y como músico! Nuestros conciertos eran a veces buenos, a veces un caos y esta vez hay una serenidad que hace que todo fluya y al final suena mejor. Esto nos conecta entre nosotros y al final es lo mas importante y por lo que estamos aquí… la música.
Texto: Alfred Crespo