Mujeres es un grupo especial. Son como esos amigos que sabes que siempre van a estar ahí, que puedes contar con ellos y que nunca te van a fallar. No por nada su lema es “Rock y amistad”. Y de estas cosas hubo en grandes cantidades en el primero de los dos conciertos de cierre de gira “Ahora ruido, después silencio” (el siguiente tendrá lugar el 27 de marzo en Madrid), que cierra la gira de presentación de “Desde entrañas y flores”.
Desde el primer segundo la sala se llenó de pogos, de exaltaciones de la amistad y de gente dejándose las cuerdas vocales. Como siempre, la ejecución de los temas fue directa, sin prácticamente pausas entre canción y canción, lo justo para que la gente recuperase su sitio después de moverse en el pogo.
Tocaron básicamente temas de su última etapa, especialmente de sus tres últimos álbumes. “Besos”, “Vete con él”, “Cae la noche”, “Cardio y caladas” o “Tú y yo” sonaron tan directas y memorables como siempre. “A veces golpes” cayó con una versión rápida durante la que una espontánea se subió al escenario y un seguridad se abalanzó sobre ella para poder bajarla. La recta final, con “Al final abrazos”, “Aquellos ojos” y “Romance romántico” fue más que memorable, y dejaron para el bis (un bis en el que realmente no se fueron del escenario) su faceta más garagera. Para cerrar, después de hora y poco de concierto, “Un sentimiento importante” supo a poco, así que tuvieron que hacer otro bis pedido por el público repitiendo la parte final del tema.
La importancia de Mujeres trasciende sus álbumes y conciertos. Es una banda que ha sabido, con el tiempo, evolucionar y adaptarse sin perder su esencia. El trío conformado por Yago Alcover, Pol Rodellar y Arnau Sanz ha consolidado una propuesta sonora sin comparación alguna en el panorama español. Es un grupo que hace que lo complicado parezca fácil, que tiene una destreza en los instrumentos increíbles, que hace unas canciones que son como soles y que, además, es cercano a su público y crea comunidad. Y todo esto se refleja en sus conciertos, que son, sobre todo, una fiesta entre amigos. Menos mal que existen Mujeres.
La noche no fue exclusiva de Mujeres. Abrieron Ramona Flores, con un contundente sonido shoegaze y noventero. Les siguieron Tatxers, trío navarro que presentó su último álbum “Ezpatei disdira!”, quienes ofrecieron canciones pop soleadas con melodías luminosas y mucha personalidad en un concierto que fue de menos a más. Sonaron como una mezcla entre Parquet Courts y The Go-Betweens, es decir, magníficos.
Texto: Alvaro Rebollar
Fotos: Fernando Ramírez
