Más allá de algunas rutilantes estrellas del rock británico que fijaron en Menorca su residencia permanente o parcial, poco o nada solemos relacionar la música rock con la paradisíaca isla. Sin embargo, los tentáculos del rock and roll no entienden de fronteras geográficas, y buen ejemplo de ello es la reciente aparición de No em veus brillar de nou?, primer elepé en solitario de Pedro Sánchez Tuomala.
Bautizando su proyecto personal simplemente como Tuomala, este músico profesional menorquín reemerge con canciones propias, tras haberse hecho un nombre en el pasado a nivel local con bandas que pasaron por el surf, el heavy metal o los guiños a Monster Magnet. Todo ello, además, sin olvidar su salto a la península como integrante del excelente tributo a Pink Floyd llamado The Other Side. Ahora, en este disco presentado en precioso vinilo rojo, encontramos ocho canciones sinceras y pasionales, que ponen al descubierto tanto su predilección por el rock clásico, como que su inspiración parte de experiencias propias. “Es la única manera que tengo de escribir. Mirar hacia adentro e intentar sacar cosas positivas, como canciones, de los lugares más oscuros. La pandemia, y ciertos bandazos en mi vida, despertaron otra vez mis ganas de componer, grabar y defender en directo unas cuantas canciones que reflejaran mis influencias, mis ideas y mis sentimientos. Que cada uno haga lo que le plazca, pero yo no hablo de política ni cosas de éstas, ya que no me gusta predicar ni que me prediquen”.
Así, por ejemplo, la inicial “Es Vent” revela una sana admiración por el Neil Young más eléctrico, con intensos y largos solos de guitarra incluidos. Se funden esas estructuras sónicas con su historia sobre crecer en un entorno aislado de sus inquietudes musicales. Al contarlo en menorquín, casi se diría que está patentando un patrón innovador. “Mis referencias musicales son anglosajonas casi al cien por cien. Pero un buen amigo me dijo que hay que cantar en la lengua que usas para hablar, y me pareció que tenía mucho sentido, ya que escribir en inglés, por ejemplo, era esconderse en cierta manera. Así que empecé a escribir poemas y letras en catalán, los musiqué y adapté al formato canción, y así se quedó. No pensé en innovar ni en ser único, simplemente hice lo que salía naturalmente”.
Otra influencia obvia es Tom Petty, del que adapta su “Insider”, aquí renombrada como “Estrany”. “Fins sa polla estic”, tema del que ha rodado un video clip, es un medio tiempo que podría y debería captar la atención de un público amplio, a pesar de su título políticamente incorrecto… ¡o quizás gracias a él! También entre lo más accesible del lote se sitúa “T’estim”, con un tono exultante que contrasta con el de “Tornant”, canción en la que Pedro exhibe todo su poder vocal con una pasmosa facilidad.
Por otra parte, al desplegarse el efectivo riff y ritmo de “Dins es forat”, pensamos en la calidad de los músicos que han hecho posible un sonido tan compacto. “Mis músicos reflejan el tremendo nivel instrumental que hay en la isla. La música es una salida profesional debido al turismo, y muchos chavales deciden estudiar en conservatorios o academias, dejando una cantera de musicazos que se intentan abrir paso en las islas o Catalunya. Muchos de ellos escogen caminos distintos al rock, como jazz, clásica o música folk. Que estos monstruos hayan accedido a grabar mis temas y a tocarlos en directo conmigo, es algo que considero una bendición”.
Y hablando de tocar en directo, sepan que Tuomala actuará próximamente en Barcelona. Será el día 9 de noviembre en Razzmatazz 3. “Llegaremos de la mano de Neverland. Aprovechamos la presentación del disco para montar un mini-festival de grupos menorquines que se intentan abrir paso. Contamos con Dahlia (la banda de mi guitarrista) y Verlaat (banda del teclista). Como ves, ¡la escena en Menorca es muy endogámica! Son dos grupos que están haciendo cosas muy interesantes en su estilo y creo que se quedará una buena tarde por 15 eurillos”.
Texto: Xavier Llop
