El jovencísimo Wyatt Flores ha hecho lo que apuntaban sus pasos anteriores: grabar un disco magnífico. Ya lo era Half Life, su predecesor, que pecaba de corto. Pero este Welcome To The Plains lo confirman como uno de los grandes del rock norteamericano de raíces. Nacido en Oklahoma, aunque de origen hispano, como indica su apellido, se convirtió en un fenómeno de Internet con la canción «Please Don’t Go» que le llevó a los 65 millones de reproducciones en Spotify. Por eso este disco era toda una reválida que ha superado con nota. Oficialmente, de hecho, es su primer LP, ya que Half Life siempre se vendió como un EP largo. Y en el primer tema del disco, el que le da título, ya lo tenemos todo. Una buena melodía que transita con fulgor en una letra donde tienen cabida los cambios climáticos y las injusticias hacia los indígenas. Made in Wyatt Flores. Poco tarda en demostrarnos que la cosa va muy en serio con «When I Die» que reflexiona sobre lo fugaz de la vida, con un muy buen trabajo vocal. Nos falta comprobar si con los temas lentos iba a pasar la prueba del algodón y ahí está «Oh Susannah», un adictivo medio tiempo. Lo bueno es que temas como «Angels Over You», «The Good Ones» y «Only Thing Missing Is You» no tienen nada que envidiar a los citados. Perfectamente producido, el álbum es ideal para los que disfrutan de los discos de Austin Lucas, Will Hoge o Zach Bryan. Recuerden su nombre – aunque ya se lo apuntamos antes en la sección Hay un forastero en la ciudad – porque es muy bueno.
Eduardo Izquierdo