El madrileño David Ripoll concilia sus dos almas musicales, la del underground y la del cantautor sentimental, en el primer EP de su proyecto personal. Tras adelantar en otoño ‘Podemos seguir’ y ‘Tiene que arder’, Ripoll afianza sus coordenadas estilísticas con las dos nuevas piezas que completan su presentación oficial.
La canción titular e inaugural, ‘Marinero Sentimiento’, llega acompañada de un videoclip dirigido por Miguel Yubero y rodado en una playa de Valencia.
El EP reúne una colección de cuatro canciones donde se concentran las dos tendencias que tironean el corazón de este músico: la que llena de crujidos after-punk (con ayuda de la inconfundible voz de Raúl Querido abriendo este EP) los andamiajes de su pop, y la vena arrabalera que emerge y narra desde ese fango de feedbacks, poniendo luz porteña a la canción como el Calamaro de barrio sur de Madrid que en el fondo es.
Es, en esencia, la única forma de conciliar esas dos almas a las que la música de Ripoll se debe: la de su pasado underground, en el que resuena el fantasma de Surfin’ Bichos, pero también el porte descarado y actual de Fontaines D.C., a la vez que la del poeta sentimental y afectadamente romántico que lo acerca al pop de Los Rodríguez.