Excelente ambiente en la sala mediana de Razzmatazz ante la visita del contrabajista de los Stray Cats, que ofreció un buen concierto, si bien con algunos matices. Matices fundamentados en lo milimétrico del recital, todo acompasado con lo que se proyectaba en la pantalla de vídeo trasera, y en la zona de confort en que Lee y los suyos se instalan a la hora de escoger el listado de temas a interpretar en vivo.
Posee una extensa discografía en solitario, con algunas grabaciones muy recomendables, y entiendo que hubiera sido un gran acierto que esos trabajos propios hubieran tenido más peso dentro del repertorio. Repertorio amplio en versiones, algunas posiblemente innecesarias (por excesivamente obvias) como «Honey Don’t», «Rockabilly Boogie», «That’s Alright Mama» o «Blue Moon Of Kentucky», y en lecturas de temas de los gatos, «Stray Cat Strut», «Runaway Boys», «Built For Speed», «Rumble in Brighton» o «Rock This Town».
Y ahí, en esas canciones fuera de los totémicos clásicos del género y de las composiciones de la banda madre fue donde estuvieron los mejores minutos, demostró su buena voz en dos excelentes interpretaciones, «I Won’t Stand Your Way» y «Memphis Freeze», y se dejaron llevar por el frenesí, rocanroleando con nervio, en «Miracle In Memphis», «Bulletproof», «When Nothing’s Going Right» o «Dog House Shuffle». Nota para la mejor adaptación de la noche, ese arrebatador aire a Nueva Orleans con que atacan el «Ophelia» de The Band. Y dejar constancia de la aparición final de un impetuoso Carlos Segarra para ejercer de músico invitado.
Volviendo al principio, ¿buen concierto?, desde luego, tiene oficio y talento, se acompaña de unos músicos bregados, aunque un servidor hubiera gozado si le hubiera dado más cancha al piano, y creo que la inmensa mayoría del personal asistente salió satisfecho con lo que acababa de presenciar. Pero el abajo firmante ha echado a faltar que asumiera un pelo más de riesgo y que hubiera sido algo menos autocomplaciente. Por lo demás… ¡Que viva el rock & roll!
Manel Celeiro
Fotos: Sergi Fornols