Cerrábamos el artículo sobre murder ballads publicado en la edición impresa de Ruta 66 con un pequeño apartado titulado No lo creerías, pero sí en el cual repasábamos algunas canciones sobre asesinatos compuestas y/o interpretadas por artistas -digamos- improbables. No mencionada entonces, pero sin duda inscrita en tal categoría, la canción de hoy merece que nos detengamos en ella tanto por sus méritos intrínsecos como por lo insospechado de sus creadores.
En efecto, si buscáramos una conexión lo más remota posible entre las murder ballads y sus intérpretes, «Rosie Had Everything Planned» podría llevarse la palma. Quien conozca mínimamente la trayectoria de los ingleses conocerá la canción, aunque puede que no se haya detenido a analizar la letra que subyace bajo tan delicada melodía. Obviamente y tratándose de una banda como ellos, no cabría esperar un baño de sangre ni una descripción del crimen cercana al gore, sino más bien una triste historia de (supuesta) infidelidad y rumores que imprudentemente se dan por ciertos. Dudas que se resuelven en el jardín de casa, trabuco en mano.
Tercer tema de la cara A en Indelibly Stamped (1971), como curiosidad más allá de lo lírico cabe señalar que se trata de la única canción de toda la carrera de la banda en que Rick Davies no aparece acreditado como compositor. En su lugar, la firma Roger Hodgson a medias con Frank Farrell, el cual acababa de fichar como bajista. Cuentan las crónicas, además, que el tema fue compuesto la misma noche en que se oficializó su incorporación al grupo. Al respecto puede leerse, en el interior de algunas reediciones del álbum, el siguiente texto:
“Una historia sin principio ni final, escrita en mitad de la noche, cuando teníamos que estar ocupados en algo para permanecer despiertos. Surgió sin pensarlo y la terminamos en unas pocas horas. Frank la coescribió durante su primer día en el grupo, y toca en ella el piano y el acordeón”.
¿Y qué nos cuenta el tema en cuestión? Pues básicamente los celos de una mujer que cree que su hombre la ha engañado con otra. Diversos versos de la canción apuntan a que la información que le había llegado podía no estar del todo contrastada, aunque ella la creyó a pies juntillas. Y, en consecuencia, decide matarle. Huyendo de lo explícito, Hodgson y Farrell describen tanto el estado de ánimo de Rosie como el homicidio en sí mismo de forma sutil, con una serie de imágenes muy bien escogidas: ella de pie en el jardín sosteniendo el arma, los titulares del día siguiente…
Acting upon information received
Rosie had everything planned
Stood in the garden with shotgun in hand
What a woman
Whilst entertaining the headlines next day
Rosie would not be released
If it was found that her man was deceased
Silly woman
Oh but Rosie, a girl with a strange kind of humour
Stupidly took in a rumour
Making her think that she’d lost
Double-crossed by a man who was dear
Stood in the garden and shaking her head
Rosie could not understand
Wiping her eyes with the back of her hand
Sad, sad woman
Oh but Rosie, how could a few words have made her
Certain that he had betrayed her
Making her think that she’d lost
Double-crossed by a man who dear
Very near to her
Row upon row of Angel Hair
Rosie had everything planned
Sure that the people would not understand
Sad, sad woman
La canción, un ejercicio de folk rock que recuerda tanto a los Beatles como a Simon y Garfunkel, encajaría en ese apartado sobre murder ballads protagonizadas por mujeres que también tratamos en el artículo en papel. Una letra y un tipo de relato, en cualquier caso, en los que Supertramp no volverían a incidir.
Eloy Pérez
He escuchado mil veces este bello tema, y no me había percatado nunca de su contenido. Me ha encantado el artículo.