Conrado es un chaval atípico. Eso es innegable para cualquiera que tenga el gusto de conocerle. Mod veinteañero cuando ya no quedan mods veinteañeros; acumulador de discos y ropajes bonitos, cuando su generación vive exclusivamente en Spotify y viste H&M, y pirotécnico baterista de pop cuando el pop es ya cosa de gente a la que, cuando entramos en algún sitio, nos tratan de usted, y cuando viajamos en metro — la madre que los parió– nos ceden el asiento.
Pero, vean, ahí está él: pantalón de talle bajo de cuadros, elegante polo DNA Groove color mostaza, Bass Weejuns de un burdeos exacto y unas relucientes Ray-Ban. Ese chico leonés que ya lleva forjada una sólida trayectoria a los tambores de Cooper y que, en 2016, unía fuerzas con Héctor Escobar –quien fuera bajista de Los Flechazos– y con el músico y compositor, Maxi Martínez, para dar luz a Los Modernos, un trío de Pop en la tradición de todas aquellas bandas de los 90 que, sin dejar de mirar qué estaba pasando a su alrededor, bebían sin mucho disimulo de los ricos posos dejados por los predecesores, pioneros y maestros de los 60 y los 80.
El caso es que, ahora, Los Modernos sacan nuevo disco, su segundo ya, que lleva por título “Tiempos Modernos”, que está disponible en CD (“del vinilo ya iremos hablando”, advierte el baterista) y que, miren, se ha quedado un día estupendo para comentar la jugada con Conrado. Y que éste se explaye un poco más sobre la banda y su circunstancia.
Empezamos con la pregunta de rigor: ¿Cómo, cuándo y por qué nacen Los Modernos?
Los Modernos nacemos en 2016. Tras haber colaborado en algunos conciertos de la gira PopCorner de Álex Cooper, Héctor, bajista de la formación original de Los Flechazos, decide que es hora de volver a los escenarios. Recluta en primer lugar a Maxi, con quien de vez en cuando había coincidido en eventos musicales. Tras lo cual me pregunta si estoy interesado en tocar con ellos. A mí me hacía mucha ilusión tocar con Héctor, porque en cierto modo le admiraba.
Recuerdo que a Maxi le dijo que íbamos a hacer Rocanrol, rollo Tequila. A mí me dijo que íbamos a ser súper Mods. Al final ni una cosa ni la otra, pero de ese modo consiguió meternos las ganas en el cuerpo a ambos.
Si no me equivoco, sois dos boomers y un millennial, un salto generacional muy bestia, en todo caso. ¿Se nota en vuestro desarrollo y/o en vuestro día a día, esa diferencia de edad?
Tal cual. De hecho, si me apuras, creo que yo no llego ni a ser millennial. Nací en el 1999.
Al principio yo creo que se notaba más. Héctor y Maxi me han visto cruzar la mayoría de edad, terminar el bachiller, meterme en audiovisuales, dar el salto a grandes escenarios, irme de León. Me han visto crecer y eso, en cierto modo, ha redundado en ocasiones en una relación paternofilial muy guay.
Aun así, por suerte o por desgracia, nunca he ido al ritmo al que supuestamente debería ir, dada mi edad. Siempre me he relacionado con gente más mayor. Así que, sobre todo, lo que somos es amigos, con un gran salto generacional, sí, pero eso tampoco creo que hoy por hoy se note. Nos tratamos de igual a igual, tanto para decirnos lo que nos apreciamos como para discutir en los ensayos.
Sonáis tremendamente a aquel Pop que, en los 80s y 90s, echaba indisimulada mano de la tradición pretérita de los 60. ¿Se refleja esto en vuestro público? ¿Estamos hablando de señores que peinan canas, o se respira algo de juventud en vuestra parroquia de seguidores?
Lógicamente las influencias siempre se dejan ver. La tradición musical entre Mod y Revival que se puede notar en Héctor lógicamente se ve plasmada en nuestro sonido. Maxi es un fan tremendo de AC/DC, pero en cierto modo ha sabido dejar esa influencia a un lado y echar más la vista hacia Nacha Pop, Los Pistones o La Granja. Grupos Pop de guitarras y melodías perfectas que también le apasionan y que creo que van más en la onda del grupo. Por lo que a mí respecta, comparto influencias con ambos, pero añado también otras muchas cosas. Yo llevo ya unos años en los que lo que más suena en mis auriculares son Fountains Of Wayne, Nada Surf, Lemonheads… Descubrí el rock americano de los 90s y los 00s y me voló la cabeza. Cambió mis influencias por completo y creo que algo de eso hay también. Sobre todo, en el nuevo disco.
En cuanto al público, es muy complicado arrastrar a gente joven a nuestros conciertos teniendo en cuenta qué música hacemos y que, por lo general, ésta hace mucho que se alejó de la música Pop tal y como nosotros la entendemos. Aunque a veces nos hemos sorprendido, ojo. Nuestro nicho de público es aquel que ha llegado a nosotros o bien escucharnos en nuestra ciudad o bien por la relación que hayamos podido tener con Cooper y Los Flechazos. No somos un grupo con un gran número de seguidores, aunque los que hay son muy fieles.
En 2018 salís a palestra con el álbum “2 Minutos” y ahora, tres años después (bueno, dos si no contamos esa engañifa que fue 2020), publicáis vuestro segundo álbum. ¿Qué ha cambiado, evolucionado en todo este tiempo?
Todo. Ha cambiado todo. En lo musical creo que hemos evolucionado mucho. “2 Minutos” era un disco de canciones que Maxi había compuesto en su casa, algunas años antes de la formación de la banda, y lo grabamos en un fin de semana, en un estudio pequeño, todos a la vez y con muy poco presupuesto.
Con “Tiempos Modernos” hemos encontrado nuestro ‘mejor lugar’, que decían Los Hermanos Dalton. Es un álbum de canciones que hemos trabajado entre los tres, dándoles forma y encaminándolas juntos. Está grabado de una forma mucho más profesional y con mejores medios. Queríamos que se notase la diferencia y que este segundo disco fuera reflejo de todo lo que hemos estado trabajando. Creo que lo hemos conseguido: hemos dado un salto de calidad tremendo en todos los aspectos, tanto en lo técnico como en lo musical, y eso el público que nos sigue lo está notando.
¿Qué se va a esperar el oyente que le eche la zarpa a este LP por vez primera?
Si como referencia tienen el primero y van en busca de algo parecido, se van a llevar una gran sorpresa. Para bien o para mal, pues entendemos que habrá gente a la que le resulte más estimulante el estilo más áspero de “2 minutos”.
Con “Tiempos Modernos” se encontrarán un disco mucho más Pop, más melódico y más bonito. Las letras están cargadas de mensaje y sentimiento, de todo aquello que Maxi escribe logrando que los tres nos sintamos identificados. Escucharán instrumentos que en un principio no se asociaban a nosotros: guitarras de doce cuerdas al estilo Byrds, órganos Hammond, incluso sección de metales. Todo eso junto, licuado y pasado por el colador de Los Modernos.
¿Qué escenarios habéis pisado con más satisfacción, y cuáles esperáis visitar pronto (si nos dejan y tal)?
Tocar en León, para nosotros, siempre es un placer. Compartir nuestras canciones con familiares y amigos mola mogollón. Nos encanta tocar en el Gran Café, es sentirse en casa. También nos hizo mucha ilusión ser la banda local del Purple Weekend en su 30 aniversario, creo que ha sido uno de nuestros mejores conciertos hasta el momento.
Para el 2020 habíamos conseguido por primera vez presencia en festivales. Teníamos algunas fechas confirmadas, entre ellas el EbroClub, de Miranda de Ebro, que nos hacía mucha ilusión. Esperamos que, en cuanto sea posible, podamos volver a salir y llevar nuestras canciones a todos los sitios donde las quieran.
Todos sois músicos con una cierta trayectoria y muchas inquietudes. Habladme de otros proyectos en los que andéis metidos.
Pues como bien dices, esa inquietud que todos tenemos nos dirige a caminos que no creíamos que abarcaríamos. Este 2021 se celebran a nivel mundial los 700 años de la muerte de Dante. Nosotros, desde la admiración, estamos terminando de grabar una musicalización de “La Divina Comedia”, concretamente del Infierno. Es una especie de ‘ópera Pop’ a la que, en la línea de este último disco, hemos puesto música y letras a cada círculo que compone el Infierno. A mayores de nuestras guitarras, bajos y baterías hemos grabado violines, gaitas y unas líneas de vientos en las que se fusiona a la perfección el Pop de Los Modernos y la faceta más clásica de los músicos con los que hemos contado.
¡Joder! ¡Qué proyecto más chulo!
Está mal que yo lo diga, pero es increíble. Maxi ha creado un universo ‘Moderno’ que encaja como un puzle con el de Dante. Tenemos muchas ganas de que vea la luz, ya que además será en formato CD-Libro y van a colaborar un montón de escritores e ilustradores de primer nivel.
Texto: Alberto Valle