Harpers Bizarre es recordada hoy, los pocos que se acuerdan, por haber sido la banda donde el productor Ted Templeman ejerció de músico. Ted, antes de verse asociado a las carreras de Van Halen, Doobie Brothers y Little Feat y convertirse en un peso pesado de la industria discográfica, lo intentó por la vía soñada: con su propia banda, cantando y tocando la batería. Harpers Bizarre es otra banda más de la dorada California de segunda mitad de los sesenta: pop barroco, grandes armonías vocales, y canciones (no escritas por la banda en su mayoría) que podían gustar a jóvenes y grandes.
Muchos vieron en ellos el producto de Lenny Waronker, arreglista asociado a la nómina de Warner Brothers. Y hay mucho de cierto en ello, pues Lenny les impuso grabar múltiples versiones y canciones escritas por tipos como Randy Newman, Leon Russell o Van Dyke Parks. Les relegó, también, a ejercer de meros vocalistas en muchas de las grabaciones, trayendo para acometer las bases musicales a los curtidos músicos de la Wrecking Crew (Carol Kaye, Jim Gordon, Glen Campbell…). Pero cierto es que su discografía (al completo en esta box set de 4 cd’s) tiene momentos bellos aquí y allá, especialmente en Harpers Bizarre 4, obra con la que dieron carpetazo a una carrera que nunca acabó de despegar.
Come To The Sunshine ofrece los cuatro discos oficiales de la banda, varios singles adicionales y un ilustrativo libreto. Ideal para curiosos, aficionados al sunshine pop y derivados de las directrices marcadas por Simon & Garfunkel; ya saben, baja intensidad y melodías ilustres. Para otros, atrayente por ser la banda donde Ted Templeman empezó a ver que su interés era más el de gestionar la mesa de mezclas que estar bajo los focos. El propio Ted se apropió la autoría como arreglista vocal en los dos últimos trabajos de la banda. Un visionario, vaya.
Texto: Sergio Martos
